El sábado, Marcelo Espina renunció a la dirección deportiva de Blanco y Negro. En quizá el año más traumático en la historia de Colo Colo, deja el club, donde ya fue jugador y entrenador, tras dos años y medio en el cargo.
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En su carta de despedida, el “Cabezón” asumió la responsabilidad por la situación deportiva del “Cacique”, que se encuentra en zona de descenso. Eso sí, pidió que se le juzgue solamente por lo relacionado a la cancha, no por los conflictos extrafutbolísticos que han impedido el normal desarrollo de la temporada 2020.
En esa línea, el exvolante se desligó de la decisión de ByN de acoger al plantel a la Ley de Protección al Empleo. “Lo que no asumiré, son responsabilidades por hechos ajenos a mi función. Jamás me he entrometido en los temas económicos propios del Directorio, en relación al pago a los jugadores, cosa que tampoco ocurrió en este año”, aclaró en la misiva.
Así, le pasó la pelota a Aníbal Mosa, Harold Mayne-Nicholls y compañía respecto a mandar a los futbolistas al Fondo de Cesantía, como también se desvinculó de la polémica que se desató por la intención original de no pagar el sueldo y el tratamiento de Matías Zaldivia mientras se recuperara de su lesión. Éstos y otros problemas han tenido claras consecuencias en una plantilla mermada físicamente.
“El equipo fue el más perjudicado en un año difícil, por un montón de razones que ya son de público conocimiento. Estamos pagando en todos los partidos la falta de muchos jugadores por todos estos inconvenientes”, recuerda Gustavo Quinteros en contacto con El Gráfico. “Contra Unión Española nos faltaron 10 hombres y cuando llegué nos faltaban 11, es un tema complicado de solucionar, que no lo podemos parar. Todavía tenemos que luchar contra esa adversidad”, complementa.
El DT sólo tiene palabras de elogio para el “Calamar”. “Conmigo, lo único que puedo decir es que fue un gran profesional y una gran persona, siempre con la mejor relación. Yo le estoy agradecido, porque él fue quien me llamó en marzo para que pudiera llegar. Para mí es un orgullo dirigir a Colo Colo, aún en estos momentos”, cierra el argentino-boliviano.