El miércoles pasado, una de las celebraciones que llamó la atención en San Carlos de Apoquindo fue la de Alfonso Parot. Tras el empate ante Unión La Calera, que significó el tricampeonato para Universidad Católica, el zurdo tomó el carrito que se usa para transportar a los lesionados y lo manejó junto a Fernando Zampedri, su gran amigo.
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Después, ambos agarraron sus autos y festejaron con sus familias en la casa del delantero argentino, con quien forjó una estrecha relación en Rosario Central. De hecho, el “Poncho” maniobró para la llegada del “Toro” a la “Franja”, ya que José María Buljubasich le consultó por él cuando estaban negociando.
“Los hinchas me dicen que yo lo traje, pero él se lo merece. Demostró en todos lados que es un goleador de tomo y lomo, y por suerte llegó acá y consiguió demostrarlo”, destaca el talquino. “Más allá de ser compañeros, somos amigos. Mi señora también con la de él, nuestros hijos lo mismo”, complementa.
El “Tati” te preguntó por él en su momento…
—“Zampe” venía de una lesión, así que me preguntó cómo estaba. Yo hablé con él y me dijo que estaba impecable. También me preguntó cómo era como persona, porque en la Católica se preocupan mucho de eso, y le dije que era una excelente persona, que éramos amigos, así que ahí le di el empujoncito para el “sí” de Cruzados.
¿Pensaron que se les escapaba el título en algún momento?
—No, siempre hubo convicción. Desde la primera fecha con Wanderers, estaba el convencimiento de la idea de juego de Ariel y de conseguir el objetivo, que era el tricampeonato, más allá de que a veces no se nos dieron los resultados, sobre todo en las últimas fechas, porque tanto nosotros como los otros equipos estábamos cansados, por eso no nos pudieron pasar. Fue muy agotador todo, porque el fútbol chileno no está acostumbrado a jugar dos o tres partidos por semana. Fue un cambio brusco, pero supimos mantener la punta.
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Te faltó jugar de lateral derecho nomás en la defensa. ¿Se siente Alfonso Parot el “comodín” de Holan?
—Sí, me tocó jugar de central por derecha e izquierda, de stopper y de lateral izquierdo, en todos lados. Pero bueno, uno trabaja para ello, para estar siempre disponible.
¿Te imaginabas hace 10 años, después de la dolorosa final contra la “U” de 2011, que iban a estar viviendo esto?
—Sí, la verdad es que sí, yo siempre tuve fe en el proyecto del club, más allá de que durante un par de años no pudimos conseguir el objetivo. Acá siempre se manejaron igual, la convicción estaba y ahora se están viendo los resultados de un trabajo extraordinario que está haciendo la dirigencia. Obviamente, pasamos penas en los años que no se nos dio, pero ahora vamos sacando los triunfos, así que estamos muy contentos.
Tú eres un poco el resumen de la Católica en esta década, te las lloraste todas, te fuiste y volviste, y ahora las celebras todas…
—Sí, me tocó estar en las malas, en las peores y, ahora, me está tocando estar en las buenísimas, así que estoy muy feliz por todo lo que estamos viviendo los “cruzados” y las “cruzadas”. Es un alegría tremenda poder seguir haciendo historia en este club tan lindo.
Te tocó ser capitán en algunos partidos. ¿Te vas sintiendo preparado para tomar la posta que en algún momento el “Chapa” va a ir soltando?
—Me tocó el orgullo de llevar la jineta un par de partidos. El tiempo pasa y ya soy uno de los más viejitos del plantel, jajajá, pero viendo cómo está el “Chapa”, le quedan muchos años. Parece que nos vamos a retirar juntos, jajajá.
Alfonso Parot, cuatro etapas en la UC
Ésta es tu cuarta etapa en la UC. ¿Ya te quedas o está la idea de volver a partir?
—Me queda este año de contrato todavía. Mi idea es seguir y quedarme acá el mayor tiempo posible. Ahora, si llega una oportunidad de afuera, se hablará con el club, pero si me tengo que quedar, feliz de la vida.
Hay que pagar la deuda internacional, piden los hinchas…
—Sí, obviamente. Hemos estado sumamente bien en el Campeonato Nacional, pero nos falta dar ese pasito en el ámbito internacional. Estamos con la ilusión de darlo.
¿Cómo le pegó personalmente a Alfonso Parot la eliminación ante Vélez, donde tuviste responsabilidad en los goles?
—Sí, el golazo que nos metieron desde fuera del área al ángulo nos pegó fuerte. Habíamos hecho lo más difícil, que era ganar en Argentina, y que después se nos escapara en el último minuto en San Carlos nos dolió mucho. Pero de esas cosas se va aprendiendo para la próxima edición.
¿La veían como la gran oportunidad, por los equipos que quedaban?
—Sí, más allá de los equipos que quedaban, nosotros estábamos haciendo un buen fútbol, teníamos un buen funcionamiento. No te voy a mentir, estaba toda la ilusión, pero igual creo que hicimos una gran Copa Sudamericana. Pero bueno, no era nuestro momento nomás, esto es así, a veces por detalles se te escapa algo importante, pero nos supimos parar de vuelta y conseguir el objetivo principal, que era el tricampeonato.