Cristian Garin (22° del mundo) tenía la gran posibilidad de desafiar en el ATP 500 de Barcelona a Rafael Nadal (3°), ex número uno y leyenda sobre superficie de arcilla. Sin embargo, el chileno se quedará con las ganas, luego de tener debut y despedida en el torneo tradicionalmente conocido como Conde de Godó.
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El «Tanque», quien quedó libre en primera ronda por su condición de 13° cabeza de serie, cayó en su estreno en segunda ante el japonés Kei Nishikori (39°), ex 4 del planeta, por parciales de 7-6 (5), 4-6 y 6-1, en un partido donde estuvo 4-2 arriba en el primer set con quiebre a favor, pero no pudo mantener la ventaja y se desmoronó.
El primer set estuvo marcado por los constantes quiebres. Garin entregó su servicio en el tercer juego, pero lo recuperó en el cuarto y luego consiguió otra ruptura en el sexto. Sin embargo, perdió su saque de manera increíble dos veces y el nipón sacó 5-4 por el set. Y aunque el nacional reaccionó para quebrar y después forzar a un tie-break, en el desempate no estuvo certero y se inclinó por 7-5.
En el segundo episodio, las cosas fueron diferentes, pues los dos jugadores estuvieron más firmes con su servicio. Eso sí, el nacido en Arica quebró en el quinto juego y después solamente tuvo que mantener su envío para igualar las acciones y mandar todo a un tercer y definitivo parcial.
En el capítulo final volvieron los fantasmas para el chileno y le entregó su saque al asático en el segundo game con una doble falta. Luego, en el tercero no pudo aprovechar un par de bolas de break y cedió en el cuarto otra vez para quedar rápidamente 4-0 abajo, por lo que ya se le hizo muy cuesta arriba el partido y finalmente se inclinó por 6-1, tras poco más de dos horas y media.
De esta manera, Garin quedó 1-1 en el historial ante Nishikori (el nortino había ganado el 2020 en Hamburgo por 6-0 y 6-3) y ahora tendrá que viajar a Portugal, donde la próxima semana disputará el ATP 250 de Estoril.
