Muy caldeados quedaron los ánimos en Colo Colo, luego de que el árbitro Fernando Véjar no cobrara penal a favor de los albos por un presunto codazo de Cristián Suárez a Gabriel Costa, en el encuentro que terminaron perdieron 1-2 ante Palestino.
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Jugadores y hasta el propio director técnico, Gustavo Quinteros, reclamaron airadamente al árbitro, quien terminó expulsando al entrenador y mostrando tarjeta amarilla a Maximiliano Falcón y al mismo Costa.
Ya en conferencia de prensa, el asistente técnico Leandro Stillitano reiteró la molestia de la banca del «Cacique» por el cometido del colegiado, por una jugada que pudo haber cambiado el resultado del partido.
«Los árbitros son seres humanos como cualquiera de nosotros y se equivocan. Respecto a la jugada, no diré nada, las imágenes hablan por sí solas. Lamentablemente, no es la primera vez que no pasa, pero, esta vez en particular, la imagen habla por sí sola», dijo el ayudante.
«Con Gabriel Suazo, en una jugada parecida, se tomó otra decisión. Es materia de análisis, porque las imágenes hablan por sí solas», agregó Stillitano, en referencia al codazo que le dio el lateral a Gonzalo Espinoza en el superclásico y que le costó dos fechas de expulsión al capitán del «Popular».
En cuanto al trámite del partido, el asistente subrayó que «fuimos superiores. Además del gol, tuvimos dos o tres posibilidades que no pudimos concretar. El rival fue efectivo y concretó. Esto se decide por goles. Las ocasiones que tuvimos no las pudimos concretar».
Finalmente, se quejó por el escaso tiempo que tuvieron para preparar el duelo con los árabes, a causa del caso positivo de covid-19 y los contactos estrechos detectados en el plantel, quienes recién el jueves pudieron volver a las prácticas.
«Tuvimos dos días para preparar el partido y estamos conformes porque creemos que fuimos superiores y pudimos ampliar el resultado. No es normal, venimos de una situación muy particular. No incidió en el resultado, pero también hay que analizar en el contexto», explicó el argentino.