Revolución Democrática, desde que se inició el camino para avanzar en una nueva Constitución, dijo que se requerían mecanismo de participación directa. Y a través de un voto político, establecieron el mecanismo. Todo con miras hacia la elección de los integrantes de la Convención Constituyente.
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«Encargamos a la Directiva Nacional velar por la organización de al menos 100 cabildos a los largo de todo Chile, apuntando a mantener activa la organización de nuestros vecinos y vecinas y abriendo camino a su incidencia directa en la Convención mediante metodologías de participación ciudadana donde podamos también poner en debate nuestras propuestas», sostiene la determinación del Consejo Político de RD.
Ante la resolución, la timonel Catalina Pérez recalcó que «los protagonistas de este proceso deben ser representantes de nuestro Chile diverso, que conocen las injusticias cotidianas de este sistema. El tiempo de los mismos de siempre ya pasó, y las mayorías que se expresan en las calles deben expresarse también en la Convención, con una presencia contundente de independientes e integrantes de organizaciones sociales. Para eso estamos trabajando. Los mismos de siempre deben entender que esto no se trata de ellos y que llegó el momento de ceder poder».
Junto a dicha medida, la Comisión estimó que para alcanzar urge una respuesta institucional «radicalmente democrática», se tiene que asegurar la inclusión de independientes las lista de constituyentes, «especialmente dirigentes sociales, un 10% de representantes de la comunidad LGTBIQ+, personas en situación de discapacidad, y quienes representen la amplia diversidad».
El votos, además, insta a la directiva a hacer todas las gestiones necesarias «para generar el mayor entendimiento posible con las fuerzas de cambio», y para contar con una estrategia electoral «acordada prioritariamente con las organizaciones sociales». Esto, para evitar la «dispersión y la sobre representación de quienes no quieren cambios para mantener sus privilegios».
De cabildos a mecanismos electorales
El voto político también hace presente que se deberá elaborar un diseño electoral que le permita a la diversidad de los grupos ser efectivamente electos en la Convención «de modo de asegurar la amplitud de la asamblea y fortalecer la legitimidad del proceso». Ponen a disposición la tienda, para causas compartidas como la defensa del derecho al agua, la lucha por un nuevo sistema de pensiones, dirigencias sindicales, organizaciones feministas y otras nacionales y territoriales.
Asimismo, se definió empujar en el Congreso los proyectos que permitirán incluir y representar a la gente: escaños reservados para pueblos indígenas y personas en situación de discapacidad, y mejoramiento de las condiciones para que independientes puedan ser elegidos, «garantizando especialmente la posibilidad de que pacten entre sí».
De la misma forma, acordaron elaborar una propuesta de reglamento, dialogarla y acordarla con la sociedad civil y partidos políticos para asegurar el control, incidencia y participación de la gente en el proceso.
