La mascarilla se ha transformado en el acompañante infaltable para todas las personas en estos tiempos de pandemia. Es ahora más importante que salir de la casa con la billetera o las llaves de la casa.
PUBLICIDAD
Y dada su importancia, es que hay que impedir a toda costa que los niños la pierdan, o dejarla sobre la mesa cuando se va a algún restaurante, etc.
Fue lo que visualizó Constanza Pino, dueña de Befree, quien tenía que llevar a sus hijos, Emma y Nico a la clínica por las vacunas anuales y preocupada por esta situación se le ocurrió hacerles unos tapabocas, tomó unos retazos de telas repelente al agua que tenía guardada de trabajos anteriores en distintas productoras de eventos, buscó sobrantes de trapillos y con sus propias manos cosió la tela y les colocó unos boches para hacer que su diseño fuera lindo, práctico y funcional, sin imaginar el éxito que serían.
Hoy en día, estas mascarillas están de moda y le dan glamour a la hora de enfrentaar el coronavirus.
Si quieres sumarte a la moda de los colgadores de mascarillas y además, que sean originales, debes ingresar al sitio web de Be free o a su cuenta de Instagram.