La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, tuvo un pequeño traspié antes de entrar al palacio del Elíseo para entrevistarse con el presidente francés Nicolas Sarkozy. Luego hablaron de Haití, Irán y el terrorismo.
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Clinton, como la Cenicienta, perdió su zapato en el último escalón y Sarkozy, como el príncipe, tuvo que ayudarle para que no perdiera el equilibrio en las escaleras.
El presidente francés y la secretaria de Estado norteamericana se reunieron hoy en París para discutir posibles penas al régimen de Teherán, además de tratar la organización de una conferencia de donantes para Haití Nicolas Sarkozy, cuyo país asume en febrero la presidencia del Consejo de Seguridad de la ONU, ha venido defendiendo la imposición de sanciones a Teherán.
Entre los otros temas tratados en el encuentro figuraban la conferencia de donantes para Haití que se celebrará los días 22 y 23 de marzo en Nueva York, las relaciones bilaterales y otras cuestiones de seguridad. Hillary Clinton también tenía previsto reunirse con el ministro de Exteriores francés, Bernard Kouchner.
La jefa de la diplomacia estadounidense dio además una conferencia sobre asuntos de seguridad en el Instituto de Investigación Estratégica en la Academia Militar (IRSEM).
En respuesta a una pregunta sobre el envío de soldados estadounidenses a Haití, Clinton defendió esa medida argumentando que la ayuda tras el devastador sismo de principios de mes “no podría haber sido gestionada sólo por civiles”.
Las consecuencias del desastre fueron tan graves, añadió, que problemas clave como la distribución de comida sólo podían ser resueltos por el Ejército.