Al fin los habitantes de Phu Yen, ubicada en el centro de Vietnam, podrán bañarse tranquilos. Los pescadores de la localidad lograron atrapar a un temido tiburón que rondaba por la costa, el que medía cinco metros y pesaba una tonelada.
Según las autoridades, la bestia era la responsable de una serie de ataques a personas en la playa indochina e incluso llegaron a ofrecer 400 euros por su cabeza.
Los restos del tiburón quedarán en el Instituto Oceanográfico de Nha Trang, donde se determinará su especie y se verá si efectivamente él fue el atacante de los bañistas.
Publicidad
