BUENOS AIRES, julio 22.- Durante casi cinco horas un asaltante mantuvo como rehénes a cerca de 30 personas al interior de un banco en Argentina, lo que mantuvo en vilo a gran parte del país.
El hecho delictual se inició cerca del mediodía cuando una banda intentó asaltar una sucursal del Banco Nación de Rivadavia, el cual se encuentra a sólo 400 metros de una comisaría.
Ante la situación, rápidamente intervino la policía y un par de delincuentes logró escapar. El único que quedó al interior tomó de rehenes a clientes y empleados.
Según trascendió de fuentes policiales, el detenido tiene 20 años, fue identificado como Josué Rodríguez Coronel y ya poseía una orden de captura por robos anteriores. También se supo que durante la tarde fueron apresadas algunas personas más en una estación de servicio de Pilar, y se cree que se trataría de los cómplices.
Mientras se desarrollaban las negociaciones, la policía rodeó el lugar y paulatinamente el ladrón fue liberando gente, a cambio de comidas u otros pedidos. Los primeros que dejó salir eran embarazadas y jubilados.
Durante la toma, Rodríguez Coronel mantuvo diálogos con canales de televisión. Allí dijo que los rehenes estaban “todos bien” y aclaró: “Yo no maltraté a nadie, disparé dos veces, no más”. Además pidió “cámaras de televisión, un auto y algo para comer”. También les mandó un mensaje a su mujer, Jésica, y a su hija, Leila, diciéndoles que las amaba, informa Clarín.
Mientras esto sucedía, familiares y conocidos de los rehenes se aglomeraban frente a la entidad para tratar de saber algo de ellos. Finalmente, alrededor de las 16.30 la Policía le trajo a su esposa y, tras unos minutos de intimidad, se entregó sin violencia.
