Tal prueba parece haber llegado de la mano de una supuesta fotografía del saudí que comenzó a rondar blogs y redes sociales, en especial Twitter, luego de conocida la noticia de su deceso.
Sin embargo, el medio español elmundo.es se encarga de echar por la borda esta hipótesis y asegura, por el contrario, que la fotografía corresponde a una edición digital o “photoshopeo”.
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El medio comenta que el montaje está realizado sobre la base de una fotografía de Bin Laden, registrada en 1998, de la cual se obtuvo la parte inferior de la cara, que incluye boca y barba. La otra fotografía corresponde a la de una persona muerta cuya indentidad se desconoce.
