James Holmes, el hombre acusado de la matanza en un cine de Aurora, EEUU, envió por correo un cuaderno “lleno de detalles sobre cómo iba a matar personas” a un siquiátra de la Universidad de Colorado antes del ataque.
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El paquete supuestamente enviado por el agresor, permaneció cerrado en una oficina postal más de una semana hasta que finalmente fue descubierto.
Agentes del FBI se dirigieron al campus estudiantil luego de que el doctor, que también es profesor de la facultad de medicina, informara el recibo de un paquete que según él, provenía del sospechoso del tiroteo.
El paquete resultó ser inofensivo, pero las imágenes incluían dibujos de personas disparándoles a otras.