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Kuczynski anuncia ley de “muerte civil” contra funcionarios corruptos en Perú

“Quien haya sido sentenciado por casos de corrupción nunca más podrá volver a trabajar en el Estado. Sea en el gobierno central, en municipalidades o las regiones”, dijo el presidente peruano

El presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski anunció el lunes la aprobación de una ley de «muerte civil», para prohibir que quienes hayan sido condenados por corrupción trabajen para el Estado, después de que uno de sus consejeros quedó envuelto en un escándalo de presunto tráfico de influencias.

«Los corruptos opondrán resistencia, lo sé, pero los venceremos», dijo el presidente durante un sorpresivo pronunciamiento público transmitido por radio y televisión y aseguró que ha pedido a sus ministros que evalúen de inmediato a su entorno más cercano.

El gobernante explicó que el miércoles, el Consejo de Ministros aprobará el proyecto de ley de Muerte Civil, «es decir, quien haya sido sentenciado por casos de corrupción nunca más podrá volver a trabajar en el Estado, sea en el Gobierno Central, las municipalidades o las regiones».

La declaración de Kuczynski, quien asumió el poder el 28 de julio, se produce luego que a inicios de mes renunciara su consejero en salud, el médico Carlos Moreno, envuelto en un escándalo de negociados ilegales en el Seguro Integral de Salud, un programa estatal para favorecer a los pobres y con el que pretendía lucrar.

El caso se conoció a través de unas grabaciones realizadas por uno de los involucrados en el negocio.

«Es inaceptable que en un país como el nuestro, con tantas necesidades, tengamos gente tratando de lucrar con el dinero del pueblo en la casa de gobierno», afirmó Kuczynski, quien subrayó haber «tenido una inmensa decepción al ver lo que ha pasado con uno de mis asesores del sector salud».

«Esa persona traicionó mi confianza», acotó el presidente sin mencionar a su colaborador por su nombre, agregando que el caso, «como corresponde, está en manos de la justicia». Otros dos asesores del presidente también han renunciado, en medio de críticas opositoras.

El gobierno recibió del Congreso a fines de septiembre y por 90 días facultades para legislar en diversas materias, entre ellas la lucha contra la corrupción.

El escándalo provocado por el caso Moreno impactó en Kuczynski, cuya popularidad cayó por primera vez en ocho puntos y se ubicó en 55% según un sondeo de Ipsos difundido el domingo.

«El 28 de julio me comprometí con cada uno de ustedes a combatir la corrupción. Ese día dije que no permitiría a mis colaboradores más cercanos, caer en la indignidad de la corrupción. Que no tendría miramientos», recordó el jefe de Estado.

«La corrupción es un problema estructural en nuestro país, histórico que viene de atrás. Pero eso se acabó», enfatizó el gobernante, un economista de derecha.

Kuczynski llegó al poder tras ganar en segunda vuelta a Keiko Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori, quien cumple una condena por corrupción y delitos de lesa humanidad.

 

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