«Al corregimiento de Otaré se desplazaron tres caravanas con el gobernador de Norte de Santander (William Villamizar), varios congresistas y los secretarios de despacho. Al regreso de esas caravanas, el vehículo último de la tercera caravana, donde estaba la escuadra móvil de carabineros, fue hostigada», declaró Villegas.
El vehículo recibió «dos o tres disparos» y el impacto de «un artefacto explosivo que logró dañarle los vidrios, sin que hubiera ninguna novedad humana, ninguno de nuestros hombres de carabineros sufrió novedad alguna», añadió el ministro.
Villegas dio a entender además que, por la zona en que ocurrió el hecho y por haber estado dirigido contra uniformados, el Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista) podría estar detrás del ataque.
«Ese es un hostigamiento en una zona y a una unidad policial muy apetecida por el Ejército de Liberación Nacional, porque sabe que nuestros carabineros están detrás del ELN en esa zona de Norte de Santander», aseguró.
El ELN, única guerrilla activa de Colombia tras la firma de la paz en noviembre pasado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), instaló el 7 de febrero en Quito diálogos de paz con el gobierno para superar medio siglo de conflicto armado.
Sin embargo, en los últimos días las autoridades le han atribuido varios atentados, el secuestro del padre de un alcalde y sospechan que estaría detrás de una explosión que se produjo el pasado domingo en el centro de Bogotá y que dejó un policía muerto y varios heridos.
