Bachelet enfrentará su primera polémica al frente de ONU Mujer

La ex Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, deberá enfrentar su primera polémica desde que asumió la dirección de la nueva agencia de la ONU dedicada a la mujer.

Ocurre que la Premio Nobel de la Paz 2003, la iraní Shirin Ebadi, calificó hoy de “chiste” la posibilidad de que su país y Arabia Saudí sean elegidos el miércoles miembros del consejo de administración del organismo.

La activista de derechos humanos aseguró que si esos dos países integran el órgano de gobierno de ONU Mujeres, la nueva institución  “no irá a ninguna parte”

“Que Irán y Arabia Saudí sean miembros es un chiste”, afirmó en una conferencia de prensa Ebadi, que pidió una mayor presión de la comunidad internacional sobre el régimen iraní.

Aunque las candidaturas no se harán oficiales hasta el momento de la elección mañana en el Consejo Económico y Social de la ONU (ECOSOC), Irán y Arabia Saudí son dos de los países que aparecen en las listas que circulan por el grupo regional asiático y el de los países donantes emergentes para formar parte del consejo de 41 miembros.

La Premio Nobel expresó la esperanza de que otros países de la región se decidan a competir con Irán y Arabia Saudí para impedir su entrada en el consejo de administración de ese organismo.

Para Ebadi, es inconcebible que su país forme parte de la nueva agencia sin haber firmado la convención internacional para eliminar todas las formas de discriminación de la mujer.

Entre otras cosas, señaló que la legislación iraní establece que en caso de compensación por muerte, la mujer vale la mitad que un hombre o que se necesita el testimonio de dos mujeres para contradecir al de un hombre.

Asimismo, recordó que la mujer no puede viajar sin el permiso por escrito de su marido, que además tiene derecho a cuatro esposas y es considerado para todos los efectos como el jefe de la familia.

“¿Cómo con esas leyes puede sentarse en el consejo de administración y hablar de otros países?”, se preguntó Ebadi, para quien la situación en Arabia Saudí en esta materia “es incluso peor que en Irán”.

La activista también se refirió en su comparecencia ante la prensa al caso de su compatriota Sakineh Mohammad Ashtiani, condenada a morir por lapidación, un caso que ha generado una campaña internacional de condena.

Resaltó que el caso de esta joven no es el único en su país y alentó a convertir la indignación que su condena ha causado en una campaña a favor de la prohibición de este método de ejecución.

Según Ebadi, la situación de los derechos humanos en su país ha empeorado después de la represión del llamado “Movimiento Verde” que se generó en protesta por la presunta irregularidad de las elecciones presidenciales de junio de 2009.

Aseguró que las autoridades han ejecutado al menos a 400 personas en lo que va de año, cuyos cuerpos posteriormente no son retornados a sus familias y son enterrados en lugares desconocidos.

Por ello, la Premio Nobel pidió intensificar la presión internacional sobre el Gobierno iraní con la imposición de sanciones “políticas”, como la congelación de bienes y la prohibición de viajar, a los responsables de la represión.

También instó a la Asamblea General de la ONU a adoptar de nuevo una resolución de condena a la situación de los derechos humanos en su país. 

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