Este miércoles se renovó la testera de la Cámara de Diputados. Gracias a un acuerdo gestado en 2010, Pedro Velásquez asumió como segundo vicepresidente.
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Su nominación causó controversia. En 2006 Velásquez, 48 años abogado de la Universidad Bolivariana, fue condenado por fraude al Fisco. El Tribunal Oral en lo Penal de La Serena, determinó que el cuatro veces elegido alcalde de Coquimbo, era culpable de comprar en $260 millones un terreno destinado a viviendas sociales, cuyo avalúo comercial era de $110 millones. El escándalo lo obligó a renunciar a su partido, la Democracia Cristiana.
El juicio se inició gracias a una querella presentada por la ex senadora y actual ministra del Trabajo, Evelyn Matthei.
La condena incluyó 300 días de pena remitida y su inhabilitación perpetua para ser alcalde. Pero no diputado, cargo para el que fue elegido en el 2009 por el distrito 8, que incluye a Ovalle, su ciudad natal, Coquimbo y Río Hurtado.
Velásquez aún adeuda $165 millones a la Municipalidad de Coquimbo como indemnización.
Elegido con cerca del 40% de los votos, es diputado con un cupo independiente. Por eso se especula que el oficialismo decidió respetar el acuerdo político que le permitió asumir, debido a que mañana el voto de Velásquez puede ser determinante para rechazar la acusasión contra el ministro Harald Beyer.
“Es un tema zanjado por la justicia. Cuando uno ha actuado siempre con la verdad uno no tiene por que tener temor” dijo Velásquez antes de asumir.
La mesa de la Cámara quedó conformada por Edmundo Eluchans (UDI) como presidente y Joaquín Godoy (RN) como primer vicepresidente.
