El empresario Leonardo Farkas manifestó su molestia contra el mundo político luego del último conflicto en el que se vio envuelto en Copiapó con el alcalde Maglio Cicardini, quien criticó la ayuda que fue a dejar a la zona norte del país, asegurando que llevó “unos jugos Yupi que me daba vergüenza entregar”.
Ante esto, aseguró a 24 Horas que “nunca tendría aspiraciones de tipo político, ellos me han hecho la vida imposible. No soy político ni nunca lo fui”.
En ese sentido, indicó que con sus acciones “solo quiero contagiar a otros empresarios para ayudar a los más pobres del país”.
Además, reveló que abandonará los negocios para dedicarse a la filantropía, agregando que se irá del país para radicarse en Estados Unidos, por lo que venderá todas sus propiedades y que cuando venga de visita a Chile se quedará en hoteles.