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Un tema que no estuvo en el discurso de la Presidenta fue sobre las modificaciones que se demandan desde diversos movimientos sociales a la Ley 20.000 sobre uso de drogas. La presidenta de la Fundación DAYA, Ana María Gazmuri, que hace sólo unas semanas realizó la primera cosecha de cannabis para fines terapéuticos en conjunto con la Municipalidad de La Florida, se mostró bastante desilusionada con la ausencia de medidas en esta materia.
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“Muy desilusionada. Esperábamos que como un gesto de reconocimiento a los miles de usuarios medicinales, como un gesto a la labor de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados que está impulsando estos proyectos de despenalización, al menos una corrección para sacar a la cannabis de la lista 1 (que incluye las llamadas drogas duras), para enmendar el error que se cometió en la administración anterior (cuando Bachelet incluyó la cannabis en esta lista”, señaló con un dejo de molestia Gazmuri.
La presidenta de DAYA, agregó que este tipo de omisiones genera contradicción en el discurso del Ejecutivo, ya que “a través de sus servicios (SAG) permite el cultivo de cannabis con fines medicinales”, con lo que “está reconociendo su uso terapéutico”.
“La presión que han hecho los sectores conservadores ha hecho lo suyo y ha tenido su efecto”, alega Gazmuri, concluyendo que “desgraciadamente vemos que estos sectores que se resisten a este cambio de paradigma están defendiendo un status quo que los beneficia”.
