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Juan Aguayo Díaz, salió un día de su casa, en Los Ángeles, y se perdió toda pista él. Desde el 01 de agosto del año pasado que su familia y la PDI lo buscan sin que hasta el momento exista algún antecente sobre su paradero o posible muerte. Perla Aguayo, comenta que han agotado todas las instancias para poder encontrarlo “nuestra vida se detuvo y vivimos en función de buscar a mi hermano”.
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Según la Policía de Investigaciones, en la actualidad hay más de 3 mil casos de adolescentes entre 13 y 17 años que han sido investigados como presuntas desgracias en el último año en Chile. Esta cifra causa alarma considerando que la gran mayoría de éstos jóvenes hicieron abandonos voluntario de sus hogares. La Santiago lidera la lista de casos, seguido de la VII, V, IX y la X región.
Existen ciertos patrones que se repiten frecuentemente en los casos de adolescentes reportados como desaparecidos. El jefe nacional de Ubicación de Personas (Jenaup) de la PDI, Pablo Rojas, explicó que en la gran mayoría de los casos los jóvenes se sienten incomprendidos en sus familias, poseen carencias emocionales y grandes problemas de comunicación con sus padres, por lo que deciden huir, exponiéndose a riesgos mayores.
Las cifras entregadas por la PDI indican que en el 2012, se trabajó en la búsqueda de 2.014 jóvenes y 2.128 en el 2013. Los números indican que la región metropolitana es la que posee más desaparecidos (entre los 1-17 años de edad). Lideran las comunas de Puente Alto, La Pintana, Maipú, Santiago y La Florida.
“Existen casos de mujeres que se van con el pololo y pueden ser víctimas de otro delitos, las malas amistades, bajo rendimiento o con problemas de drogas, pueden ser factores importantes a la hora de tomar esta extrema decisión. Los padres deben conocer a los amigos de sus hijos y con quienes tienen contacto en sus redes sociales. Más allá de su bienestar material, es necesario que tengan conocimientos de sus intereses”, comenta el comisario de la Jenaup, César Brevis.
Brevis explica que se agotan todas las instancias hasta poder dar con la persona, no hay límites económicos, ni de instrucciones para ir en la búsqueda de personas desaparecidas, “incluso tenemos apoyo del Ejército”, dice. Existen investigaciones de baja, mediana y alta complejidad. El oficial que realiza la entrevista al denunciante se basa en un protocolo para ver a qué categoría corresponde.
El mito de las 24/48 horas
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Si la persona que denuncia determina que la persona que busca no se encuentra en su circuito cercano y existe una mínima sospecha de que le puede haber ocurrido algo, se debe informar de inmediato.
El comisario César Brevis comenta que es un mito el plazo de las 24 o 48 horas para informar la desaparición. “El éxito de la nuestra investigación, que tiene un 97% de efectividad, radica en que nuestra unidad especializada trabaja inmediatamente. Hay un carro que ante cualquier hecho sale a trabajar con un equipo integrado por un oficial experto en investigación, un sicólogo y un oficial de rastreo”, agrega.
Justo cuando comienzan las vacaciones de invierno, y de forma preventiva, la Jefatura Nacional de Ubicación de Personas de la Policía de Investigaciones de Chile y la Municipalidad de Santiago lanzaron la campaña: “Conversar: La mejor prevención. Evitemos el extravío de adolescentes” que busca disminuir las cifras de investigaciones por presuntas desgracias y crear conciencia de esta realidad que viven familias chilenas. “Los padres deben estar atentos y generar una buena comunicación con sus hijos. Deben preocuparse por ellos mucho más allá de sus necesidades materiales”, afirma el prefecto Pablo Rojas.
