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Tras cuatro meses de implacable persecución, fue hundido el barco pesquero ilegal “Thunder”, el más buscado del mundo y el cual contaba con tripulación chilena.
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El hecho ocurrió en la República Democrática de Santo Tomé y Príncipe, un pequeño país africano, el cual fue rodeado por las naves de la ONG australiana Sea Shepherd, el cual detectó que la embarcación se hallaba pescando merluza negra en una zona subantártica protegida por acuerdos internacionales.
Según consigna El Mercurio de Valparaíso, fue detenido en abril pasado y fue condenado a tres años de prisión el capitán de la nave, Luis Alfonso Rubio Cataldo, quien además deberá pagar una suma de 15 millones de euros.
Una cifra similar tienen que cancelar también el ingeniero jefe, Agustín Dosil Rey, y el segundo mecánico, Luis Miguel Pérez Fernández, quienes son de nacionalidad española.
En tanto, otros chilenos que estaban en el barco son el ingeniero Luis Morales Mardones, de 59 años, Gerardo Subiabre Hernández (49) y José Carrión Alvarado (52)
PUB/CM