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UDI presenta proyecto que aumenta penas por tráfico ilegal de órganos

“Si una persona utiliza órganos humanos de otra persona, ya sea para adquirirlos o venderlos, manifiesta su absoluto desprecio por la vida en todos sus aspectos y en donde el lucro prima sin ninguna consideración moral o ética”, dijo el diputado Coloma.

Junto a un grupo de parlamentarios de su partido, el diputado y jefe de la bancada de la UDI, Juan Antonio Coloma, presentó un proyecto de ley que tiene por objetivo aumentar las penas por el delito de tráfico ilegal de órganos.

«El trasplante de órganos es uno de los avances científicos más importantes para la humanidad; sin embargo, la escasa disponibilidad de órganos y el aumento progresivo de la demanda, configuran el más grande desafío hacia el futuro. Es por ello que nuestro país incorporó en su legislación la ley 19.451 sobre trasplantes y donación de órganos. Lamentablemente, debido a la gran demanda que se estima cercana a los 100 mil trasplante cada año a nivel mundial, se ha establecido un comercio informal e ilegal destinado a traficar órganos, lo que ha obligado a los países a promover medidas que prevengan y sancionen estas conductas”, dijo.

Coloma enfatizó que “la presencia de grupos dedicados a esta actividad ilícita constituye un gran problema que debe ser enfrentado con fuerza y de forma contundente”.

Y añadió: “Si bien nuestra legislación considera sanciones para estos actos, pensamos que cuando se intenta comercializar con órganos de un tercero, el hecho es aún más grave, por lo que amerita una mayor sanción. Es por ello que hemos presentado un proyecto que establece la pena de presidio mayor en su grado mínimo, esto es de 5 años y un día a 10 años para el caso del tráfico de órganos cuando éste es promovido por una persona con órganos de terceros”.

“Si una persona utiliza órganos humanos de otra persona, ya sea para adquirirlos o venderlos, manifiesta su absoluto desprecio por la vida en todos sus aspectos y en donde el lucro prima sin ninguna consideración moral o ética. Es por lo anterior que la penalidad establecida en nuestro país respecto a este hecho consideramos que es particularmente baja, particularmente si se piensa que el tráfico de órganos es un delito de claras connotaciones internacionales y por consiguiente, posee ribetes particularmente graves que lo apartan de otros crímenes”, finalizó.

PUB/CM

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