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La presidenta del Partido Socialista, Isabel Allende, manifestó su desaprobación al traspié legislativo que sufrió el Gobierno al presentar un proyecto de «Ley exprés» que pretendía solucionar los cambios de domicilios en el padrón electoral, el cual no tuvo el suficiente respaldo entre los parlamentarios para su tramitación.
“Lo primero que yo quiero hacer es lamentar la situación. Evidentemente aquí hay que hacer una investigación a fondo y seria, que no puede quedar en la impunidad. La Contraloría y el Ministerio Público van a investigar, por tanto, ahí sabremos con precisión y certeza, cuál es el grado de responsabilidad y de qué institución, Registro Civil, SERVEL, eso lo determinará las otras instituciones que ya he señalado”, dijo Allende.
La parlamentaria, además destacó que todos los parlamentarios concurrieron ayer “con disposición de votar un proyecto de ley si es que efectivamente era una posible solución, pero eso requería un amplio consenso, porque es un tema delicado, complejo e importante. No hubo ese consenso y ese apoyo. La derecha se negó a votar un proyecto de esta naturaleza, y razonablemente, la Nueva Mayoría decidió no asumir en soledad esta decisión, porque tal como lo hemos señalado es un tema difícil, y nosotros no tenemos que legislar apresuradamente, sino buscando una solución definitiva”.
“Hago un llamado a las autoridades para que tengamos uno definitivo, y un llamado también como país. Aquí se pueden dar varios domicilios, el comercial, el electoral, el que aparece en el carnet de conducir, y por cierto, la dirección de del lugar en que vivimos, y esto también se presta para confusiones”, dijo la senadora al reiterar la existencia de una padrón electoral único.
Finalmente, Isabel Allende mencionó que “necesitamos un Servel que efectivamente sea eficiente, autónomo, controlador de las elecciones, fiscalizador de éstas. Pero no es un legislador, y eso hay que dejarlo meridianamente claro”.
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