La red WikiLeaks, el rescate de 33 mineros en Chile, el pulpo Paul y la matanza de 72 inmigrantes en México figuran junto al nacimiento de Jesús en el belén navideño que exhibe el arquitecto hondureño Fernando Martínez.
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La obra de Martínez, exhibida en un centro comercial de Tegucigalpa, recrea también acontecimientos políticos locales como la toma de posesión del presidente Porfirio Lobo y la salida al exilio en la República Dominicana del derrocado ex mandatario Manuel Zelaya, ambos ocurridos el 27 de enero pasado.
El belén, que Martínez confecciona desde hace 30 años, se ha convertido en un atractivo por combinar la tradición religiosa y escenas de la vida diaria con hechos importantes registrados durante el año tanto en Honduras como en el extranjero.
Así, unas huellas de pies recortadas en cartón rojo simbolizan el camino de WikiLeaks hacia los secretos del servicio exterior de Estados Unidos revelados por esa red, y 23 pequeños ataúdes las víctimas hondureñas de la masacre de 72 inmigrantes en Tamaulipas (México).
En el apartado de la participación de Honduras en el Mundial Sudáfrica 2010 también aparece el pulpo Paul, que se hizo célebre por sus acertadas predicciones, la principal de ellas que España ganaría el título.
Martínez también recrea el drama del rescate de los 33 mineros chilenos así como el trayecto de los inmigrantes hondureños hacia EEUU.
Entre los hechos relacionados con la crisis política hondureña, además de la investidura de Lobo se simboliza el exilio en la República Dominicana de Zelaya tras un encierro de varios meses en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, donde se refugió luego de volver clandestinamente a Honduras, de donde los militares lo expulsaron en el golpe de Estado del 28 de junio de 2009.
Siempre sobre Zelaya, se incluyen las marchas de protesta de sus seguidores y la muerte por frío del burro “Palmerolo”, que el ex mandatario regaló a un cacique indígena durante su gestión.
También se recrean el robo, calificado de “insólito” por la prensa local, de una avioneta de una base área donde estaba en resguardo tras haber sido decomisada a narcotraficantes y la lujosa remodelación de su despacho con una donación de empresarios que le costó el cargo al ministro de Industria y Comercio Oscar Escalante.
Los desastres ocasionados por las lluvias, las víctimas de la violencia y otros temas figuran en la obra de Martínez, quien fue canciller de Honduras y embajador en Brasil, donde estudió.
Martínez considera su belén como “un regalo al pueblo hondureño”, el que elabora con distintos materiales a partir de septiembre.
Según relata, su madre, Rosinda de Martínez, comenzó en 1950 la tradición de montar el nacimiento de Jesús, tarea en la que él ayudaba y que asumió como responsabilidad personal en 1980.
La obra de Martínez se suma a otras tradiciones que los hondureños disfrutan en esta temporada navideña y de fin de año, en la que instituciones públicas, bancos, comercios y personas particulares también instalan belenes y árboles de gran tamaño.
A pesar de la crisis económica, los hondureños también se preparan para disfrutar de las comidas y bebidas tradicionales, en medio de un clima con bajas temperaturas por la llegada de frentes fríos procedentes de Norteamérica.
El Gobierno ha anunciado el pago de unos 5.000 millones de lempiras (unos 263 millones de dólares) en salarios y aguinaldos para los empleados públicos en diciembre, lo que, sumado a los que otorga el sector privado, suponen una fuerte inyección económica. EFE