Chris Wong perdió su iPhone en la nieve mientras estaba esquiando. Sintió feo, pero el joven no estaba dispuesto a darse por vencido. Chris consiguió un detector de metales para ver si podía localizar el smartphone.
Todos sus amigos le decían que estaba loco, que sería imposible volver a encontrarlo.
Este video demuestra que la perseverancia nos lleva a conseguir nuestros objetivos.
Observen cuál es el resultado de esta travesía.