Una de las prioridades de Kim Kardashian a la hora de educar a su hija North West es inculcarle su pasión por la moda, por eso contrató un sastre que trabajará con su propio equipo de imagen, para que los conjuntos que luzca su hija siempre vayan a juego con los suyos.
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El vestuario se planifica con anticipación. El equipo de madre e hija se reúne periódicamente para discutir como lucirá la familia en público.
“Kim ha contratado un sastre para North. Su única función es hacer pequeñas versiones de los vestidos de Kim y asegurarse de que siempre vayan uniformadas. El sastre además también tiene la función de estilista de la niña, trabaja con los equipos de Kim y Kanye para diseñar sus ‘looks’, señaló una fuente a la edición británica de la revista Grazia.