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Duras críticas emitió Alberto Salas, presidente de la Confederación de Producción y Comercio (CPC) luego que la Comisión Mixta despachara el proyecto de Reforma Laboral.
«Es un acuerdo político que busca artificialmente darle más poder a los sindicatos, desequilibrando la relación entre empresa y trabajadores», señaló Salas y reiteró que es «un mal proyecto».
A su vez, el líder del gremio empresarial dijo que «en vez de legislar apuntando a mejorar las condiciones de trabajo y aumentar la productividad, nos vemos enfrentados a una normativa que aumenta la incertidumbre, rigidiza el mercado laboral y puede aumentar la conflictividad».
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A juicio de Salas «lo que hoy necesitamos son normas que favorezcan el diálogo entre trabajadores y sus empresas, que nos permitan crecer en medio de la inestabilidad económica, fortalezcan la confianza y no nos pongan a unos contra otro».
Sin embargo, para el timonel de la CPC esta reforma «yerra su foco, porque se preocupa solamente de fortalecer los derechos de los sindicalizados y no de un alto porcentaje de la población en edad de trabajar que no trabajo».