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Un dato: 71% de los usuarios son menores de 35 años. Actualmente, la red social número uno entre los más jóvenes es Snapchat y lo podemos notar por su presencia incluso en otras redes.
¿Quién no ha visto una foto con filtros de Snapchat? Seguro entre nuestros contactos conocemos a alguien que ha subido su “selfie” con orejas y hocico de perro.
Sin embargo, usar esta red social no es tan sencillo. Si bien no es una ciencia, se complica porque no es tan perceptiva y “obvia” como lo puede ser Facebook, por ejemplo. Sí tiene su “truco”.
Por eso y para ya no sentirnos como los rezagados de la moda y la tecnología, les traemos una sencillísima guía rápida para entender lo básico de Snapchat, ¡empezamos!
Rápidamente, ¿qué es Snapchat? Sin darle tantas vueltas: es una red social donde podemos compartir imágenes, videos y también mandarnos mensajes privados.
Las “historias” –fotos y videos– públicas se eliminan en un día y los mensajes en segundos, después de leídos, por supuesto.
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Entrar al mundo Snapchat
Lo primero es descargar la aplicación. Esta se encuentra tanto en la App Store de iPhone como en la Play Store de Android. Es completamente gratuita. Una vez instalada, nos registramos.
¿Y luego?
Empecemos por agregar a nuestros amigos. Sólo elijan el “Fantasmita” que se encuentra en la parte superior de la pantalla.
Ahí pinchen en “Añadir amigos” y encontrarán las diferentes maneras para hacerlo. Para que sus amigos los agreguen sólo tienen que tomar captura de pantalla a su código, el mismo que se encuentra en esa misma página. Es el amarillo con puntos y un fantasma en medio. O, en su defecto, mediante nuestro nombre de usuario.
¿Y esta cámara, qué?
Ahora nos encontramos frente a una cámara. ¿Y esto qué? Bueno, como dijimos, esta red trata de fotos y videos, pero ya llegaremos a eso.
Por ahora, si deslizamos el dedo de izquierda a derecha, aparecerán nuestros mensajes. Para abrirlos tenemos que deslizar el dedo sobre la conversación una vez más de izquierda a derecha.
Cuando enviamos un mensaje, desaparecerá 10 segundos después de haber sido leído.
Si la persona a quien le enviamos el mensaje –que puede ser texto, foto o video– toma una captura de pantalla, la aplicación les avisará. Nada de sorpresas.
Ahora sí, ¿cómo compartir fotos y video?
Evidentemente, esto se hace desde la cámara en la página de inicio. Sólo pulsen el botón redondo hasta abajo de la pantalla.
Pero… ¿y los efectos bonitos?
Al tomar una foto, podemos deslizar el dedo de izquierda a derecha y aparecerán algunos efectos y filtros.
Si queremos los más famosos, antes de tomar la foto, debemos mantener presionado nuestro rostro en la cámara hasta que aparezca una especie de máscara.
Inmediatamente podremos ver en la parte de abajo los diferentes efectos que podremos usar.
Asimismo, en la parte superior derecha podremos encontrar las opciones para añadir texto o emoticones a nuestros selfies.
Y para el video, sólo mantengan presionado el círculo que contenga el efecto con el que quieran grabarlo.
Estas fotos -o videos- durarán 24 horas, después se irán para siempre.
¿Qué más?
Cuando deslizamos el dedo de derecha a izquierda aparecerá nuestra “Historia”. Desde aquí podemos ver el contenido que hemos subido y también podremos descargarlo a nuestro móvil para no perderlo una vez que se borre.
Ahí mismo podremos encontrar los diferentes canales de celebridades, noticias, humor, etc.
Hasta abajo veremos las historias de nuestros amigos. Sólo tenemos que pinchar en ellas para ver la imagen o el video completos.
También es bueno aclarar que si alguien toma una captura de pantalla de nuestra foto o video, la aplicación nos avisará tal como lo hacen en el área de mensajes. Pero precaución, porque si son ustedes quienes toman la captura, también les avisará a sus contactos.
Ya teniendo noción no es tan complicado, ¿cierto?
Claro que, entre más la usen, más funciones irán descubriendo.
Los invitamos a compartir más consejos o “trucos” para usar Snapchat y ayudar a los que apenas inician en este mundo.
