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«¿Qué ves en esta figura?», «¿Qué color prefieres?» y «Dibuja un hombre bajo la lluvia» son sólo algunas de las preguntas más temidas que realizan los reclutadores de una empresa a los candidatos para un puesto de trabajo. Los test sicológicos son una de las etapas del proceso de selección más importantes y muchos postulantes se preocupan de cómo enfrentarlos.
No son pocos los que se memorizan las «respuestas correctas» que aparecen en web, pero la tarea es ardua ya que hay una gran variedad: el famoso Test de Rorschach (las diez láminas manchadas con tinta), test de Lüscher (conocido como el «test de los colores»), test de Zulliger (láminas manchadas con tinta), test 16 PF (cuestionario con más de cien preguntas) y todos los test gráficos posibles (hacer que el entrevistado dibuje personas o escenas).
Pero, ¿se puede realmente engañar a un test psicológico? «Sí, se puede engañar a los test sicológicos, pero resulta extremadamente difícil», afirma Sandra Inostroza, secretaria de estudios de la Escuela de Sicología de la Universidad del Pacífico.
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Sin embargo, la especialista advierte que hacerlo «es complicado, porque los test suelen construirse con ‘escalas de mentiras’, ‘escalas de consistencias’ y/o ‘escalas de validez’. Si se intenta a toda costa engañar una prueba objetiva, lo más probable es que se invalide la prueba o que quede de manifiesto que el evaluado está mintiendo».
Inostroza añade que un sicólogo con buen entrenamiento en pruebas psicométricas laborales podría darse cuenta fácilmente si no se contesta con honestidad, considerando que en algún momento podría equivocarse u olvidar la respuesta que debía dar, o bien el psicólogo podría preguntarte algo que no estaba predeterminado. Además, apunta a que los examinadores no sólo analizan respuestas verbalizadas, sino también su postura, comportamiento, etc.
«Cuando las respuestas son aprendidas previamente, la persona las recita. En ese caso, un especialista que esté atento debiera reconocer cuando alguien contesta de memoria», explica la experta psicometría laboral.
Aunque logre aprender las respuestas para un test y pasar la prueba no verbal al contestar frente al examinador, igualmente depende de la prueba que le pongan enfrente y de qué imagen quieres trasmitir. Además, hay algunos test más factibles de engañar que otros. «Las pruebas objetivas, como por ejemplo cuestionarios con respuestas estandarizadas, son más falseables que las pruebas proyectivas, como los test de colores, test gráficos, de manchas, etc., porque en este último caso el sujeto no conoce la tarea, no sabe lo que debe hacer, ya que los estímulos son inestructurados, ambiguos«, indica la especialista.
Inostroza subraya que lo importante es hablar con la verdad y estar tranquilo a la hora de contestar las preguntas. «En una entrevista laboral es aconsejable ser siempre lo más sincero posible a la hora de ejecutar los test y enfrentar el proceso de evaluación con tranquilidad. Un test sicológico por sí sólo no te sacará de un proceso de selección laboral, porque se hacen varios para cotejar», sostiene.
Lo que un test psicológico puede decir de ti
La prueba psicológica se trasformó en una de las etapas esenciales de un proceso de selección laboral. ¿Por qué casi todas las empresas lo aplican? «Los resultados que arrojan los test sicológicos facilitan la toma de decisiones. En otras palabras, ayudan a la organización a identificar al candidato que mejor se adecue a las necesidades específicas del puesto y a las necesidades generales de la empresa. La gran ventaja de los test es que los datos obtenidos pueden compararse con los de la población general», explica Inostroza.
Las empresas habitualmente desean conocer a profundidad a cada candidato, sabiendo cómo reacciona frente a situaciones de estrés, su relación con la jerarquía, etc., y para ello estas pruebas son herramientas fundamentales.
«Los test sicológicos pueden hacer referencia a cualquier aspecto del funcionamiento síquico. Las pruebas pueden clasificarse en: pruebas de inteligencia, de personalidad, pruebas clínicas, cuestionarios y registros de conducta, etc. Por lo tanto, se puede obtener información del área cognitiva, afectiva, conductual, relaciones interpersonales, características de personalidad, etc. Es decir, los test permiten hacer una descripción profunda de la personalidad de un sujeto y también hacer diagnósticos. Por ejemplo, se puede detectar cuando la persona está deprimida, si es introvertida, impulsiva o si es sicópata», concluye la académica.
DP/PCP