El Departamento de Estado de EEUU ha publicado recientemente una alerta de viaje a los ciudadanos americanos, advirtiendo que los eventos enfocados a agrupar a grandes multitudes son propensos a convertirse en blanco de los terroristas. La advertencia destacó la amenaza hacia los fans que asistirán al campeonato de fútbol Euro 2016, que tendrá lugar en Francia durante junio y julio. También destacó la JMJ de la Iglesia Católica en Cracovia, Polonia, que comenzará el 25 de julio, como un evento que tiene un alto riesgo de ataque. James J. F. Forest, experto en terrorismo y la seguridad internacional en la Universidad de Massachusetts Lowell, EEUU, explica por qué tenemos que mantener la calma y seguir adelante.
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¿Es probable que la JMJ en Polonia y la Eurocopa de 2016 sean el blanco de los terroristas?
– Estas y otras reuniones de alto nivel en toda Europa no son más peligrosos que visitar Oktoberfest o Disneyland en París. No tiene sentido que temamos más una reunión pública importante, y no otra, sin ninguna prueba real de que exista una amenaza específica contra una en particular.
¿Qué tan probable es que se conviertan en blancos para los terroristas?
– Las reuniones públicas y eventos deportivos siempre han sido, y siempre serán, entre los muchos tipos de objetivos que los terroristas pueden aprovechar para un ataque, junto con el transporte público, hoteles, edificios de oficinas, y muchos otros. No hay manera de cuantificar o calificar una mayor probabilidad de amenaza terrorista para un tipo de objetivo sobre otro, sin ninguna prueba real.
¿Qué otros países de Europa se encuentran en alto riesgo de ataques terroristas?
– Más de 200 años de historia nos muestran claramente que prácticamente ningún país está completamente inmune a los ataques terroristas. Hemos visto el terrorismo de diversos tipos en toda Europa: etno-nacionalistas en Turquía y España, disidentes republicanos en Irlanda del Norte, y jihadistas en el Reino Unido, Francia, Bélgica y los Países Bajos. La evidencia es abrumadora de que tienes una mayor probabilidad de estar en un accidente de tráfico en cualquiera de estos países que ser víctima de un ataque terrorista.
Mucha gente va a viajar a Europa este verano. ¿Cómo puede el público alejarse de los ataques terroristas?
– Es imposible saber qué «lugares evitar» o «qué medios de transporte son mejores» en un día determinado. Las cosas suceden en nuestras vidas cotidianas: accidentes, fallas de energía, y así sucesivamente. Actos de criminalidad y el terrorismo son sólo algunos de ellos. La gente tiene que evitar reaccionar de forma exagerada al temor del terrorismo. Si empezamos a alterar nuestro comportamiento público al evitar ciertos lugares o evitar determinados medios de transporte debido al miedo, terminamos haciendo lo que quieren los terroristas. El terrorismo es todo acerca del uso de la violencia y el miedo para obligar cambios de comportamiento y de política.
¿Qué otros consejos básicos podrías ofrecer a los viajeros?
– Estar alertos en lugares públicos y mantenerse al día con los medios locales; conocer a otros compañeros de viaje, así como los locales; preguntar y tener un plan de emergencia listo (incluyendo la comunicación entre sí y con los seres queridos de vuelta en casa, un punto de encuentro si se viaja en un grupo; suministros de emergencia, como agua y un kit de primeros auxilios, etc.). Trata de familiarizarte con el mapa del lugar que estás visitando y preparar una lista con información de contactos importantes (policía local, hospital, transporte, una embajada, etc.)
¿Qué debería hacer Europa para garantizar la seguridad pública?
– Los gobiernos de Europa ya hacen un trabajo increíblemente bueno cuando se trata de la complicada tarea de la seguridad pública. No hay tal cosa como seguridad al 100 por ciento en este mundo. Por otra parte, la seguridad no es completamente responsabilidad del gobierno, y no debemos tener expectativas infundadas en este sentido. Nosotros, como ciudadanos, debemos reconocer nuestro propio nivel de responsabilidad cuando se trata de la seguridad pública. Hacer la vista gorda a la actividad criminal, o actividades sospechosas, crea un ambiente en el que los grupos terroristas pueden operar con mayor libertad y con éxito. Si nosotros –la gente y las agencias gubernamentales– trabajamos en estrecha colaboración, se vuelve mucho más difícil que los grupos terroristas puedan llevar a cabo con éxito sus operaciones.
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