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Por primera vez, el niño de tres años que cayó en la jaula de Harambe, el gorila sacrificado en el Zoológico de Cincinnati, fue visto en público.
Isiah Gregg, y sus padres Michelle y Deonne fueron captados en la ciudad, cuando la policía se presentó para interrogarlos con el propósito de descubrir cómo es que su hijo terminó dentro de la jaula de los gorilas.
Las imágenes publicadas por el diario británico “Daily Mail” muestran al menor con algunas heridas en la frente y en el brazo.
Este mismo medio ha reportado que la familia ha decidido hospedarse con unos amigos en lo que pasa la polémica por la muerte del primate.
Michelle y Deonne Gregg han preferido no hablar con los medios, sin embargo la abuela de Isiah, Valerie Dickerson aceptó ser entrevistada por el medio, donde aclaró que agradece que su nieto esta a a salvo, pero asegura que el personal del zoológico no debió matar a Harambe, el gorila de 17 años.
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A pesar del escándalo que su sacrificio ha causado, el zoológico anunció los planes que tiene para construir una valla más alta para evitar más accidentes de este tipo.
La muerte del gorila de espalda plateada llamó la atención en el mundo entero, ocasionando un gran debate sobre los derechos de los animales, la supuesta negligencias de los padres por no cuidar a su hijo y la decisión de matar al gorila sin buscar una medida que salvara su vida.
Al respeto, Amanda O’Donoughue, una experta en estos especie de primates, defendió la decisión del zoológico de sacrificar a Harambe, explicando que el animal no se iba a ir sin lastimar al niño.
Además aclaró que los dardos tranquilizantes no surtirían efecto de manera inmediata, lo que podría haber ocasionado que este lastimara más a Isiah, como se puede apreciar en las fotografías.
