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A muchos los relaja y es que el tráfico ha logrado que las calles sean una máquina de stress, pero debes saber que fumar mientras conduces podría provocar un accidente del que no sólo tu no salgas ileso, sino que tampoco gente a tu alrededor.
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Como sabemos que los hábitos los creamos nosotros, sabemos que también somos capaces de deshacerlos, para que vayas pensando en lo bueno que sería dejar el cigarrillo al volante (y quizá mejor fuera de tu vida), te dejamos tres motivos por lo que no deberías realizar este mal hábito mientras conduces:
1. Posibles descuidos al encenderlo:
Tratando de encender el cigarro, obligatoriamente tendrá que retirar una –sino ambas- manos del volante por unos momentos y, aunque se trate de menos de un minuto, es tiempo suficiente para que sea necesario hacer una maniobra y que usted no la realice a tiempo.
2. Mientras fuma:
Sostener el cigarro en una mano le obligará a no sostener bien el timón, lo que causará cierta torpeza al hacer los movimientos correspondientes. Incluso, mientras fuma puede lastimarse las manos con la ceniza del cigarro, la cual también podría caer en sus piernas, ocasionando que pierda el control del vehículo.
3. Disminuye la capacidad de atención:
A nivel psíquico, el tabaco disminuye no solo su capacidad de atención, es decir, no está tan concentrado como debería, sino también la velocidad de sus reflejos, lo que ocasiona que reaccione más lento ante un posible desastre.
