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Para que el coche circule como debe, los cuatro neumáticos deben estar en consonancia. Es lo que se conoce como alineación de los neumáticos, un ajuste que todo vehículo va perdiendo de manera gradual y que si no descubre a tiempo puede dar lugar a varios problemas.
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Podemos decir que los cuatro neumáticos de un coche son como una orquesta: si uno de ellos no sigue la partitura al pie de la letra, la melodía no sonará afinada.
La alineación de los neumáticos se lleva a cabo en un taller. La operación se conoce como ‘paralelo’ o ‘geometría’. A través de este proceso, el mecánico ajusta los elementos de la dirección y la suspensión para que las ruedas apoyen correctamente y rueden paralelas entre sí y con el eje de la carretera. Con esta operación se evita que los neumáticos se desgasten de forma irregular, se mejora el comportamiento del vehículo y se ahorra combustible.
Para que nada de esto último te suceda, debes estar atento a los síntomas de una mala alineación de los neumáticos. Son estos:
– Desgaste excesivo e irregular de los neumáticos.
Si ves que alguna de las cubiertas de tu coche está muy gastada por los flancos o detectas vibración en las ruedas delanteras, debes llevar tu coche al taller para que revisen la alineación. Estas suelen señales que alertan de un problema en la geometría de los elementos de la dirección.
– Pones el volante recto, pero el coche se desvía a un lado.
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Un coche que, circulando tiende a irse a un lado de la vía indica que uno de los neumáticos está colocado más hacia delante o hacia atrás de su eje de lo que debería. Esto, con el paso de los kilómetros, provoca un desgaste excesivo de las gomas y puede ser un peligro para tu seguridad.
– Dirección rígida.
Si notas que para girar el volante tienes que hacer más fuerza de la habitual, es posible que tu coche tenga un problema en la alineación de la dirección.
– Aumento del consumo de carburante.
Existen múltiples razones por las que, de repente, un coche empieza a consumir más de lo habitual, entre ellas, una alineación incorrecta de los neumáticos. Si las ruedas están desalineadas, obligarán al vehículo a consumir más carburante para obtener el mismo rendimiento.
Tipos de desalineación de las ruedas
En función del tipo de desalineación de las ruedas, el desgaste se producirá en una zona u otra de la banda de rodadura:
– Convergente
Los neumáticos delanteros orientados hacia dentro se desgastan más en el flanco exterior que en el interior.
– Divergente
El interior de los hombros se desgasta más que el exterior cuando el eje motor señala hacia fuera.
– No paralelo
Si los ejes no ruedan en paralelo uno respecto al otro, el vehículo se ladea. Como resultado de la contradirección, los neumáticos se desgastan más en un lado.
Indicador Visual de Alineación (VAI)
Continental ofrece un sistema que permite saber, de un vistazo, si la alineación de los neumáticos es la adecuada. Se llama Indicador Visual de Alineación (VAI) y son unas señales que colocadas en el neumático advierten al conductor cuando hay algún fallo.
Fuente: Continental
