Hace tres años, mientras realizaba un juego de luz y sombra con la actriz, bailarina y acróbata aérea Tristana Muraro sobre una silla en su laboratorio en Buenos Aires, el artista visual, escenógrafo y titiritero Alejandro Bustos, creó una de las obras artísticas más importantes de su carrera, que no sólo ha logrado cautivar a los transandinos, sino que también, cruzó la frontera y durante su presentación en el Schattentheater Festival Schwäbisch Gmünd 2015 (Festival Internacional de teatro de sombras), logró rendir a sus pies al exigente público alemán. «Alicia, ensueño de maravillas», inspirada en el clásico de Lewis Carroll, es parte de la 9ª versión del Festival Internacional de Teatro Familiar Famfest 2016, encuentro organizado por Centro Mori. La puesta en escena transandina estará en cartelera hasta este domingo 17 de julio. El multifacético artista y director Alejandro Bustos, en entrevista con Publimetro, cuenta los entretelones de la obra y expresa su satisfacción por los resultados. «Es como un hijo que, después de estos años, ya está caminando sólo y nos está llevando a nosotros», dice emocionado. ¿Cómo ha sido hasta ahora la experiencia con el público chileno? -La verdad es que hemos tenido una gran recepción, lo que nos tiene muy contentos. Recién tuvimos nuestro estreno este viernes, pero te puedo contar que los asistentes se emocionaron, aplaudieron y he recibido muchas felicitaciones. Eso es lo lindo, que esta obra tan mágica pueda cautivar a personas de distintas nacionalidades, en este caso a los chilenos. Hemos invocado las emociones de niños y adultos. ¿Es efectivo que «Alicia, ensueño de maravillas» nació por una casualidad? Sí, fue durante un ensayo en mi laboratorio creativo. Tristana Murano estaba junto a una silla, y con el efecto de luces y sobras, en algunas rutinas ella se hacía gigante y en otras muy pequeñas. Eso me hizo recordar a «Alicia en el país de las maravillas» y pude conectar todo el material que veníamos trabajando. Desde esa mirada construimos este texto visual. ¿Cuál cree usted que es la clave del éxito de esta puesta en escena? -Son muchas cosas. Lo principal es que nuestra obra reúne diversas técnicas y disciplinas, como teatro de sombras, danza, acrobacia aérea, títeres, dibujo, diseños audiovisuales y una banda de sonido creada especialmente para la obra. Cuenta con un relato visual que la hace universal, donde cada adulto o niño la interpreta. Además, de contar con mucha magia visual, de transformación, donde una cosa se transforma en otra y así sucesivamente. ¿Cómo ha sido para usted la experiencia de rescatar expresiones artísticas más antiguas como el uso de títeres y el juego de luces y sombras, en el mundo tecnológico de hoy? -Todo un desafío, sin duda. Hoy con un computador se pueden hacer efectos impresionantes. Nuestra propuesta apela a lo simple, a lo sencillo. Con pocos elementos logramos cautivar al público. Es muy difícil lograrlo. Hoy vemos cómo la tecnología puede mostrar a un elefante en una pantalla como si fuera de verdad. El éxito de Alicia es poder crear con sensibilidad. ¿Y quiénes según su experiencia han sido los que más disfrutan de la obra, los niños o los adultos? Ambos en verdad, porque tienen distintas miradas. Aunque debo confesar que son los adultos los que más se emocionan, porque no se esperan una obra de estas características. Si bien es una obra infantil, en realidad, es una puesta en escena también pensada para los adultos, a fin de que logre sacar ese niño que lleva dentro. ¿Y alguno de estos adultos le ha comentado sus percepciones de la obra? -Sí, jajajá. A todos les encanta. pero recuerdo a una señora que se acercó a saludarme y de paso me dijo: «esta obra le llega mucho a los adultos». Y es por esta magia, porque en cincuenta minutos hace que las personas evoquen su infancia, logren conectarse con este mundo de sueños y fantasías tan lindas de la infancia. Es un mundo de ensueño. ¿Qué viene después de «Alicia, ensueño de maravillas»? Alicia es como un hijo que, después de estos años, ya está caminando sólo y nos está llevando a nosotros. Una vez que terminemos la temporada de estrenos, porque aún tenemos presentaciones agendadas en Buenos Aires, nuevamente me encerraré a crear con mi equipo, que es la parte que más me gusta. El desafío es hacer algo nuevo, con un estilo diferente. Mariana Madariaga
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