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Zlatan Ibrahimovic es la gran sensación en el mercado de fichajes del verano europeo. Luego de terminar su contrato con PSG, el sueco decidió no renovar y fichó por un año con Manchester United para reunirse con José Mourinho, con quien compartió en 2008 en Inter de Milán y fueron campeones de la Serie A.
Ahora, los hinchas esperan ansiosos ver a su refuerzo estrella mostrando su talento con la camiseta de los Diablos Rojos. Espera que se seguirá extendiendo luego que el delantero se quedará fuera de la lista de 25 jugadores que viajará a la gira a China, donde enfrentarán a Borussia Dortmund y Manchester City, el 22 y 25 de julio, respectivamente.
La razón para la ausencia de Zlatan Ibrahimovic es que tendrá una semana más de vacaciones antes de integrarse a la disciplina de José Mourinho y seguirá disfrutando de su descanso en Estados Unidos, donde ha visitado California, Venice Beach, asistió a una pelea de la UFC en Las Vegas y ha cenado con Paul Pogba o David Beckham.
Pese a que está de vacaciones, el atacante no desperdicia el tiempo y ha subido videos a su Instagram jugando fútbol o ejercitándose en una corredora. «Haciendo que el fútbol parezca fácil en Venice Beach», fue uno de los mensajes de «Ibracadabra» o también lo complementó con un: «no hay necesidad de ponerse en forma, yo me mantengo en forma. El trabajo duro paga».
Los movimientos de Zlatan Ibrahimovic en sus vacaciones han sido seguidos atentamente por los hinchas de Manchester United y también por el sitio web oficial del club, que publica los pasos que da el delantero en su descanso en Estados Unidos.
Es que la llegada del sueco promete revolucionar la Premier League y así lo entendió Eric Cantona, leyenda de los Diablos Rojos, que le mandó un mensaje en su tonoal nuevo fichaje: «En Manchester hay sólo un rey y soy yo».
La respuesta no se hizo esperar y Zlatan Ibrahimovic también lo hizo con su particular estilo: «Escuché lo que dijo Cantona. Lo felicito y siempre lo he admirado, pero debe saber que yo no a ser el rey del Manchester, seré el Dios de Manchester». La ansiedad por ver al sueco sigue creciendo.
