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un resfriado ha sido el culpable de que la intérprete británica se viera obligara a cancelar un concierto en Phoenix, el pasado miércoles 17 de agosto por la noche, cuyas entradas estaban agotadas. La cantante hizo el anuncio a través de un vídeo publicado en Instagram, en el que expuso las razones que le habían llevado a posponer el show.
explicó la ganadora de diez premios Grammy y un Oscar.
También publicó dos fotografías en la que la vemos sin maquillaje y decaída, manifestando que no quiso cancelar el concierto, pero que prefiere mejorarse para no decepcionar a más fans a lo largo de su gira.
Sus próximos conciertos están programados para el sábado y el domingo en el Staples Center en Los Ángeles.