Hace unos años, Jamie Vardy no imaginaba el presente que estaría viviendo. Jugando por equipos de menor escala en Inglaterra y trabajando en una fábrica, el destino del delantero parecía estar muy lejos de brillar en el fútbol profesional. Pero el atacante le dobló la mano al destino y se convirtió en la sensación del sorpresivo campeonato obtenido por el Leicester en la temporada 2015/2016.
Con sus 22 goles en 34 partidos, el delantero se convirtió en el máximo anotador de los Foxes, se ganó un llamado a la selección de Inglaterra y fue seguido por los grandes equipos de Europa. Sin embargo, al igual que el resto de su carrera futbolística, sus inicios en el actual campeón no fueron fáciles y así lo reveló Aiyawatt Srivaddhanaprabha, el tailandés dueño del club.
El mandamás de Leicester contó los problemas de adaptación que tuvo Vardy en su llegada al club y su adicción al alcohol.
“No sabíamos qué hacer con Vardy. Venía a los entrenamientos borracho todos los días. Ascendió directamente de lo más bajo a la Championship y empezó a beber alcohol diariamente. Yo ni siquiera sabía que bebía hasta que alguien me dijo que llegaba a entrenar borracho. Hablé con él y le pregunté: ‘¿deseas poner fin a tu carrera? ¿quieres seguir así?”, contó el tailandés.
Jamie Vardy revela su trago favorito
Aquellos duros años en el inicio de su carrera y sus problemas con el alcohol, Jamie Vardy los rememora en su biografía que será lanzada en los próximos años. Es ahí donde se puede conocer cuál fue su trago favorito en los tiempos que tenía problemas con la bebida, según un extracto del libro que publica The Sun.
El delantero, que hoy disfruta de su buen momento, cuenta que antes de ser exitoso en el Leicester disfrutaba de beber vodka mezclado con la famosa golosina Skittles. “Tenía una botella de vodka de tres litros en mi casa y le ponía muchos Skittles“, cuenta Vardy.
El delantero dejaba que las golosinas se disolvieran y así el vodka tomara sabor a Skittles. Sin embargo, su trago favorito le traía un gran problema: no le dejaba recuperarse de una lesión muscular que estaba sufriendo.
“Cuando estaba aburrido en la casa me servía un vaso, me sentaba y disfrutaba. El vodka era bueno, pero no estaba haciendo mucho por mi lesión en la pierna, que había estado así por años”, agrega.
Por eso, Jamie Vardy se acercó a hablar con el fisioterapeuta de Leicester , David Rennie, sobre su lesión y le aconsejó dejar de beber. La misma advertencia ya se la había dado el dueño de los Foxes y el delantero los escuchó. Sin los problemas que le provocaba el alcohol, el atacante mejoró su forma física y brilló en el sorpresivo equipo que consiguió la Premier League en la temporada pasada.
El delantero de Leicester tuvo graves problemas con el alcohol antes de triunfar en el actual campeón de la Premier League. En su autobiografía asegura que tenía un gusto por el vodka con Skittles.
