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Cuando un futbolista decide retirarse de la actividad, muchas veces le cuesta dejar el fútbol por completo. Algunos deciden seguir ligados al deporte que practicaron toda la vida y lo hacen como comentaristas en cadenas televisivas o construyendo ciudades deportivas para incentivar la práctica del balompié.
Sin embargo, gran parte toma el camino de dirigir. Es así como se perfeccionan en tácticas futbolísticas y realizan cursos para iniciar su carrera como entrenadores. Buscando repetir lo que hicieron como futbolistas, se lanzan a la banca.
Al menos, ese es el caso de lo que ocurre con los técnicos de la Premier League. A excepción del recientemente contratado técnico del Swansea, Bob Bradley, quien sólo jugó a nivel universitario, todo el resto tuvo un paso por el fútbol profesional.
Aunque muchos de ellos no tuvieron grandes éxitos en su época dentro de la cancha, otros si brillaron. Ese es el caso, por ejemplo, de Ronald Koeman. El holandés brilló en Ajax, PSV y coronó su carrera con Barcelona. En los catalanes, por nombrar algunos de sus títulos, ganó cuatro ligas de España y una Champions League.
Otro caso de éxitos es el de Antonio Conte. Ídolo de Juventus, el ex mediocampista sumó cinco coronas en la Serie A y también ganó la Champions League. Por si fuera poco, salió segundo con Italia en el Mundial de Estados Unidos 1994 y también en la Eurocopa del 2000.
Pero no sólo ellos brillaron y también está el caso de Pep Guardiola. Al igual que su carrera de entrenador, el español tuvo una brillante época como futbolista. Alumno aventajado de Johan Cruyff, es todo un emblema en Barcelona y ganó, entre otros títulos, seis Ligas de España y una Champions League.
Distinto es el caso de, por ejemplo, Mourinho. El portugués es un reconocido gran técnico, pero su carrera como futbolista fue todo lo contrario. Además de lo efímero de su época como jugador, siempre estuvo en clubes pequeños de su natal país.
Revisa en la galería como lucían los técnicos cuando eran jugadores y la carrera que tuvieron
Todos los estrategas que dirigen en la primera división de Inglaterra fueron jugadores profesionales. Todos a excepción del recientemente contratado Bob Bradley.
