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La navidad, al menos para los niños, es sinónimo de alegría y de regalos. Para los más adultos, en cambio, es una época que puede provocar más de un dolor de cabeza debido a la gran cantidad de dinero que se gasta tanto en la cena como en los presentes.
Por ello, el aguinaldo navideño es uno de los bonos más esperados y, aunque no es una obligación legal, el 83% de las empresas chilenas entregará una gratificación a sus trabajadores en esta fecha, según un estudio realizado por Edenred.
«Al momento de otorgar un aguinaldo a los colaboradores, éstos se sienten más satisfechos y se espera que se incremente la productividad; finalmente la empresa gana, dejando de ser este bono navideño un gasto y pasando a ser una inversión», asegura el director de la Escuela de Administración y Gestión de la Universidad del Pacífico, Nelson Stevenson.
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El estudio consultó a 86 compañías, y arrojó que cuando el aguinaldo se entrega en forma monetaria, es decir, en la liquidación de sueldo de los empleados, el monto promedio es de $90.236, mientras que si se recibe una gift card el promedio es de $60.000, y la canasta familiar alcanza los $24.112.
La forma más tradicional de entregar el beneficio del aguinaldo a los trabajadores es a través del sueldo, donde el monto es un ítem aparte y no está sujeto a descuentos como el previsional o el de salud. Sin embargo, desde hace algunos años se han comenzado a utilizar otros métodos, como las gift card, aunque la tradicional canasta familiar aún sigue vigente.
«Los trabajadores más jóvenes quieren decidir ellos mismos en qué gastar la compensación económica. Por lo tanto, ellos prefieren una compensación monetaria indirecta. Por otro lado, las personas que ya tienen familia tienden a evidenciar cierta indiferencia sobre si el aguinaldo es dinero en efectivo, una canasta familiar o una gift card de una tienda, ya que van a preferir ocuparlo efectivamente en la celebración de Navidad», agrega el académico.
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