La irrupción de un hombre armado en una pizzería de Washington, objeto de un rumor que la vinculaba a una red de pedofilia, muestra los peligros de las informaciones falsas en internet y en las redes sociales en particular.
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El episodio ocurrió el domingo último en un barrio acomodado de la capital cuando Edgar Maddison Welsh, de 28 años, ingresó en la pizzería Comet armado de un fusil de asalto para, según sus propias palabras, investigar personalmente el caso conocido como Pizzagate. Maddison Welsh disparó su fusil pero nadie resultó herido a pesar de que el local estaba lleno de familias.
El hombre, que afirmó haber recorrido cientos de kilómetros en coche desde Carolina del Norte para saciar su curiosidad, fue rápidamente arrestado por la Policía, que descubrió otras dos armas en su poder.
Los motivos que esgrimió el hombre para explicar su conducta ponen de manifiesto las consecuencias de la difusión de falsos rumores en internet durante la campaña electoral de Estados Unidos.
«Lo que pasó (el domingo) prueba que el hecho de promover teorías conspirativas falsas e irreflexivas tiene consecuencias», deploró en un comunicado el propietario de esta pizzería de clientela familiar, James Alefantis.
Su establecimiento sufrió una ola de acosos por internet desde que el sitio WikiLeaks publicara a principios de octubre mensajes electrónicos de John Podesta, director de campaña de Hillary Clinton, en los que se hacía mención a una jornada de recaudación de fondos a la que se asoció a Alefantis.
Esta revelación fue el punto de partida de un rumor infundado que afirmaba que su restaurante servía de fachada a una red de pedofilia. Además de comentarios violentos en las redes sociales, la pizzería Comet y los locales comerciales cercanos fueron amenazados por personas que se desplazaron hasta allí hasta culminar con el ataque armado del domingo.
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– El hijo de Michael Flynn implicado –
«Espero que los que atizaron estas tensiones se tomen un momento para reflexionar sobre lo que pasó aquí (el domingo) y dejen de propagar esas mentiras inmediatamente», afirmó James Alefantis.
La iniciativa del joven tirador muestra que los numerosos desmentidos para identificar de forma irrefutable el Pizzagate como una historia fantasiosa no necesariamente dan resultados.
Sitios como Infowars, conocido por divulgar teorías conspirativas e ideas de extrema derecha, continúan afirmando sin pruebas que la pizzería Comet está vinculada a una red de pedofilia.
Tras el ataque del domingo, el hijo de un integrante del futuro equipo del presidente electo, Donald Trump, se involucró en la polémica.
Michael G. Flynn, cuyo padre fue elegido para dirigir a partir de enero el poderoso Consejo de Seguridad Nacional (NSC), emitió varios mensajes alimentando los rumores y en un tuit afirmó que «mientras no se demuestre que el #Pizzagate es falso, seguirá siendo un tema».
El exgeneral, cuyo nombramiento fue uno de los primeros anunciados por Trump, no habló directamente del tema, pero a principios de noviembre difundió en un tuit un artículo que vinculaba a Hillary Clinton con casos de pedofilia.
La propagación de rumores siempre ha existido en la política estadounidense, pero con Internet se difunden más amplia y rápidamente y son difíciles de desmentir, estimaron expertos.
«Los detalles de la teoría conspirativa conocida con el nombre de ‘#Pizzagate’ no merecen ser mencionados; el problema en sí debería tomarse a risa si no hubiera sido difundido desde la base hasta las alturas por figuras de primera línea relacionadas con la seguridad nacional», estimaron especialistas en seguridad del grupo Soufan.
PUB/IAM