Cuando no hay nada para Nadia
La falsa cura de Nadia, la niña que conmovió a media España
El juez exige el pasaporte de Nadia y sus informes médicos
PUBLICIDAD
En 2009, Nadia Nerea Blanco Garau salió a luz pública cuando su padre, Fernando Blanco, apareció en varios medios de comunicación solicitando ayuda para su hija, quien padecía una extraña enfermedad terminal llamada tricotiodistrofia.
Desde ahí Blanco inició un peregrinar por diferentes medios televisivos, radiales y escritos de España, narrando las increíbles historias que ha vivido para mantener a su hija con vida… Junto con solicitar donaciones para poder costear los elevados gastos del tratamiento que lleva Nadia.
Blanco aseguró que recorrió el mundo junto a la pequeña, reclutando a los mejores especialistas en esta enfermedad, incluso, entre los países que visitó en este peregrinar figura Chile. Según el padre también estuvo en Guatemala, India, Panamá, Rusia, Brasil, Argentina, Finlandia y Cuba.
Pero lo más llamativo es la visita de un mes que realizó con su hija a Afganistán, donde encontró en una cueva al último especialista que la faltaba para trabajar en su hija.
En 26 de noviembre, el diario El Mundo narró así la batalla de Blanco por su hija: “Persiguió a uno de los mejores genetistas del mundo hasta que a la tercera aceptó investigar para su hija. Reclutó a los más brillantes científicos y los juntó en las instalaciones del Centro de Investigación Aeroespacial de Houston para que trabajen para Nadia una hora a la semana. Se llevó a la niña a Afganistán en mitad de la guerra -bajo las bombas y las balas- para convencer al especialista que le faltaba. Logró hablar con el vicepresidente Al Gore para pedirle ayuda. Hace tiempo que se está dejando morir -renunció a la quimioterapia- para dar vida”.
En esta entrevista, el padre solicitaba ayuda para recaudar 90 mil dólares, de los 137 mil que costaba una operación única que mantiene con vida su hija. Así describía Blanco esta intervención: “Gracias a la operación se le alarga la vida en torno a cuatro años. La última fue en febrero de 2013. Consiste en una manipulación genética prohibida en España. Le hacen tres agujeros en la nuca y dura 13 horas. Durante todo ese tiempo no se puede dormir. La tumban boca abajo en una cama como de masajista, imagínate. Con lo que me ves a mí haciendo el payaso en el suelo, con la tablet, jugando con marionetas, con lo que sea… Para que siga despierta. El cirujano hace una especie de reseteo y le pone el cerebro a cero. Al despertar tienes que enseñarle que somos sus padres, a leer, a escribir, a volver a andar, pero sigue viva. Y yo todo lo que necesito es tiempo para que se siga investigando”.
PUBLICIDAD
¿Una farsa?
El viernes 2 de diciembre, el diario El País, publicó una investigación en que, una a una, se fueron desmoronado las espectaculares historias de Blanco.
En su indagatoria, El País no dio con ninguna imagen de Nadia en el extranjero y al pedírselas a su padre, este aseguró que las está guardando para un futuro libro.
La tricotiodistrofia, en niños mayores a 10 años, tiene tasa de mortalidad nula.
Blanco no ha dado a conocer los nombres de los especialistas que operan a su hija, pero si habló de un tal Ed Brown, quien estaba vinculado a la Nasa y a los ganadores del Nobel de Medicina de 2013, y quien sería el mentor de la extraña operación. Sin embargo, en ningún círculo de medicina se conoce a alguien con ese nombre.
Las autoridades de salud pública donde vive Nadia aseguran que la menor nunca ha sido tratada por la tricotiodistrofia.
El padre aseguró hace unas semanas que le diagnosticaron cáncer en la clínica Teknon, en Barcelona, pero no hay antecedentes de que haya estado en ese centro médico.
Blanco dice que Nadia fue operada en Houston Children’s Hospital, pero en dicha ciudad no existe un recinto de salud con ese nombre. Es más, el diario El País confirmó que la pequeña no ha sido tratada en ningún hospital de Houston.
Investigación
Después de esta denuncia, la Justicia abrió una investigación por estafa contra Blanco y las primeras diligencias del juez apuntaron a determinar la existencia y gravedad de la enfermedad de la niña y también ha solicitado el pasaporte de la menor para confirmar los viajes.
Además, se reveló que el padre de Nadia ya había sido condenado a cuatro años de cárcel por estafa en 2000.
Tras la investigación, Blanco publicó en Facebook lo siguiente: “Aunque pareciera de película todo lo que llegué a hacer y conseguir, fue realidad. Se demostraba en las mejorías de Nadia”.
PUB/AOS