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Argentina venía complicada en los últimos años de la década de los 90. La Ley de Convertibilidad, que otorgaba paridad entre el peso argentino y el dólar y que tantos beneficios había traído a comienzos de la década (instaurada por el gobierno de Carlos Menem en 1991), ahora era la principal culpable del desangramiento de la economía transandina.
En 1998, Fernando de la Rúa, candidato de la Unión Cívica Radical, gana las elecciones con la promesa de mantener la convertibilidad, dado lo popular que era.
A esa altura ya había claridad de que la economía argentina no tenía el flujo de ingresos como para mantener esta ley, pero De la Rúa no vio (o no quiso ver) el precipicio al que llevaba al país. Fue así como el mandatario comenzó a endeudar a Argentina y los ministros de economía empezaron a rotar a medida que fracasaban en sus intentos por levantar la economía.
La última jugada de De la Rúa fue colocar en la cartera a Domingo Cavallo, el creador de la Ley de Convertibilidad. Pero la crisis ya estaba desatada. Los grandes inversores comenzaron a retirar sus fortunas ante rumores de un quiebre de la banca y el FMI le cerró la puertas a la Casa Rosada.
Es en este punto donde empiezan a encadenarse una serie de sucesos y acciones que terminaran en la mayor crisis económica, social y política de Argentina desde las dictaduras militares. Acá los detallamos:
-2 de diciembre: Cavallo anuncia por cadena nacional la instauración del “corralito” para frenar el retiro de dinero y evitar la quiebra de la banca.
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-Semana del 3 y 9 de diciembre: crecen las protestas y el descontento social. Se registran saqueos aislados en algunas zonas.
-Semana del 10 al 16 de diciembre: la posición del gobierno es delicada y la Iglesia Católica inicia una mediación, pero fracasa. La Central General de Trabajadores (CGT) convoca a huelga general. Continúan aumentando los saqueos y las manifestaciones.
-18 de diciembre: comienza el estallido social generalizado al grito de “que se vayan todos”. La situación de seguridad se hace incontrolable y los saqueos se masifican.
-19 de diciembre: De la Rúa pierde al apoyo de su partido e inicia gestiones con el Partido Justicialistas para tratar de salvar al gobierno, mientras la presión social se hace incontenible.
-19 de diciembre: el presidente declara el Estado de Sitio. Lejos de apaciguar los ánimos, la presión social aumentó y apareció la represión que dejó 36 muertos.
-20 de diciembre: a las 3 de la mañana, Domingo Cavallo renuncia al Ministerio de Economía.
-20 de diciembre: a las 19.45, y tras el fracaso de las últimas gestiones con el Justicialismo, De la Rúa presenta la renuncia al Congreso.
-20 de diciembre: a las 19.50 y ante lo incontrolable de la situación social, se posa un helicóptero en el techo de la Casa Rosada para evacuar al renunciado presidente. Una imagen que gráfica el impacto de la crisis, De la Rúa escapando de la sede de gobierno.
Después de la caída del presidente no llegó la calma. Pasaron cuatro mandatarios en semanas antes de que el país volviera a un relativo orden. La Ley de Convertibilidad fue derogada el 6 de enero de 2002.
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