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En el periodo enero-noviembre de este año, la recaudación por impuesto verde ha reportado un monto de 43 mil 400 millones de pesos y se estima que a diciembre la recaudación llegará a los $48 mil millones, con un aumento de 37% con respecto al año anterior. En 2015 la recaudación fue de 35 mil millones de pesos, informó la Tesorería General de la República junto al Ministerio de Medio Ambiente.
Este gravamen a vehículos livianos entra en su tercera etapa a partir de enero, pues comenzará a recaudar la totalidad de la tasa proyectada en 2014, cuando comenzó su vigencia, gracias a la reforma tributaria.
«El objetivo fundamental de este impuesto, que tuvo una implementación gradual y que a partir del 28 de diciembre entró es su tercera fase, es desincentivar la compra de aquellos automóviles que generan mayores emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx), ya que son gases tóxicos, irritantes y precursores de la formación de material particulado fino 2.5 y ozono, que afectan la salud de las personas», aseguró el ministro (s) del Medio Ambiente Marcelo Mena.
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En tanto, el tesorero Hernán Frigolett, añadió que la recaudación para el próximo año será aún mayor. «Si se mantiene más menos el nivel de importación de los (vehículos) que están en el alcance del impuesto, en torno a las 300 mil unidades, para el año 2017 debiéramos esperar una recaudación que esté superando los $55 mil millones».
El siguiente cuadro muestra la cantidad de vehículos ingresados al país y el monto pagado por concepto de este gravamen, en los dos últimos años:
Según los datos disponibles, el pago del impuesto se concentra en los vehículos de mayor valor y que además son más contaminantes (SUV que utilizan diésel). «Los vehículos más caros están pagando en torno a $4 millones y el próximo año van a pagar en torno a $5 millones y medio como impuesto verde», sostuvo Frigolett.
A su vez, hizo hincapié en que una persona al preferir un vehículo diésel de menor rendimiento versus uno menos contaminante puede llegar a pagar un diferencial promedio de $7 millones, sumado a los costos de mantención que podrían ser hasta el triple. «Si vamos al análisis racional del consumidor hoy debiera pensarlo más friamente, porque puede tener un vehículo bencinero que da exactamente las mismas prestaciones y el mismo confort, pero va a contaminar menos y, por lo tanto, su compensación va a ser bastante menor en términos del impuesto que va a tener que pagar», subrayó.
Comunas de altos ingresos son las que más impuesto pagan
Según este reporte de la Tesorería y el Ministerio del Medio Ambiente, en total 12 comunas concentran el 45% toda la recaudación.
Por otro lado, los vehículos que pagan más impuesto verde están en la comuna de Lo Barnechea, y Vitacura, casi cuadruplicando el promedio nacional.
DP/PCP
