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El Congreso de Estados Unidos comenzó a sesionar durante esta jornada y, con una composición mayoritariamente republicana en la Cámara de Representantes y en el Senado, se espera que se comience una fuerte campaña de desmantelamiento de las políticas concretadas durante el gobierno del presidente Barack Obama.
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Uno de los blancos prioritarios que se presume que atacará el nuevo Congreso es en el ámbito de la salud, con el cuestionamiento de la Ley de Cuidado Asequible, también conocida como Obamacare, pues a juicio de los republicanos es una de las principales causas de la lenta recuperación económica de Estados Unidos.
“Tenemos mucho que hacer y mucho que deshacer” expresó el líder de la mayoría en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, a través de una carta enviada a sus colegas.
Respecto a la situación, el presidente Obama anunció una visita al Capitolio durante este miércoles, para reunirse con legisladores demócratas y discutir la estrategia para salvar la ley de cuidado de salud. En tanto, el vicepresidente electo, Mike Pence, se reunirá con los legisladores republicanos.
Durante esta jornada, la Cámara de Representantes votará sobre un paquete de medidas que modificaría la independencia de la Oficina de Ética del Congreso, colocándola bajo el ámbito de la Comisión de Ética del Congreso, institución dirigida por los mismos legisladores. Partida a la cual los demócratas se han opuesto, ya que con este cambio el poder legislativo se fiscalizaría a sí mismo.
Además, durante esta sesión se espera que se vote sobre las resoluciones que busca censurar a las Naciones Unidas, por condenar la construcción de asentamientos israelíes en Cisjordania y en el este de Jerusalén.
PUB/JO