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La machi Francisca Linconao logró regresar a su hogar tras ser impedida en cuatro ocasiones por el dictamen de la Corte de Apelaciones de Temuco. Desde hoy permanecerá en arresto domiciliario tras nueve meses en prisión preventiva como imputada por el caso Luchsinger Mackay, semanas en que se ha visto deteriorado su estado de salud.
El académico del Departamento de Antropología de la Universidad de Chile, Claudio Millacura, conversó con Publimetro y explicó, según la cosmovisión mapuche, porque la machi ha visto mermada su salud durante el encierro, lo que incluso la llevó a estar hospitalizada en múltiples ocasiones e incluso a realizar una huelga de hambre en repudio a las decisiones de la justicia.
«Los machis son seres especiales que son elegidos por los antepasados a través de un sueño. Ellos son el punto de conexión entre el mapuche y los seres tutelares», señaló.
De acuerdo a Millacura, estos entes no habitan en cualquier parte, lo hacen en «cerros, bosques y fuentes de agua», es decir «la fuerza de la machi está íntimamente relacionada con el territorio donde habita».
Si el territorio es intervenido ella sufre estos efectos. Si a ella la sacan de su territorio y la encarcelan, la relación se rompe. No solamente queda incapacitada para sanar a otros, sino también para sanarse a si misma. La fuente de su energía -newen- es cortada», añadió.
Según el experto en cultura mapuche, dado el regreso de la machi a su territorio, «las probabilidades de conectarse nuevamente con sus seres tutelares será más efectiva» y ello permitirá su sanación.
