En diferentes redes sociales comenzaron a circular imágenes de un agente del Servicio Secreto, organismo encargado de la seguridad del presidente de Estados Unidos y de su familia, en un desfile a pie que efectuó Trump el día de su investidura en Washington.
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La figura de este efectivo siempre con las manos en la misma posición y dispuestas de la misma forma hizo surgir la teoría de que el agente llevaba manos falsas, mientras debajo de su abrigo portaba su arma lista para disparar.
Fueron varias las fotografías donde se aprecia a este efectivo a la izquierda de la primera dama Melania Trump con sus manos dispuestas en la misma posición.
Las teorías crecieron hasta que apareció una imagen en que se aprecia el agente con sus manos en otra disposición, colocando fin a las especulaciones.