En una pequeña plazoleta en Antonio Varas, Providencia, se reunieron esta mañana silenciosamente. Luego, al ritmo del cultrún y tambores africanos, simulando los sonidos ancestrales, doce brujos, entre chamanes, espiritistas, videntes y mentalistas, invocaron a los cuatro elementos de la naturaleza (tierra, fuego, aire y agua) para espantar las malas vibras, que a su juicio, estarían provocando las seguidilla de catástrofes que están afectando a nuestro país.
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«Convocamos a las energías armoniosas de nuestro universo, de esperanza y fe, para que ayude a nuestro país en estos momentos tan difíciles, cuando las llamas están devorando gran parte de nuestro territorio», explicó Paola Silva, una de las organizadoras de esta iniciativa, que fue el anticipo de lo que mostrarán en la próxima Expo Brujos, que se realizará la próxima semana, a partir del 1 de febrero al 5 de febrero, en el Cajón del Maipo.
El círculo mágico fue representado con arroz integral, azúcar, laurel y champaña. También, según los organizadores, participaron transeúntes, quienes en forma respetuosa se unieron a las oraciones. El ritual, que tuvo una duración de 20 minutos, se concentró principalmente, según comentó Silva, en pedirle a la Pachamama envíe agua a las zonas afectadas por el incendio forestal que arrasa con gran parte de la zona central de nuestro país.
«Nos reunimos para unir energías y enviarlas a la zona de la catástrofe por los incendios forestales. Percibimos que estos incendios son por la inconsciencia humana, la desconexión con nuestra naturaleza, por la explosión de emociones negativas de rabia. Todos eso que estamos sintiendo, lo materializamos y resentimos a nuestra naturaleza», reflexionó Rayén Fuentes, quien hace más de siete años se dedica a las terapias energéticas, reiki y tarot.
Tras su cometido, los brujos, reaccionaron satisfechos por la ceremonia. «La naturaleza es sabia y poderosa y sabemos que nos escuchará», advirtió Paola Silva.
