Tres empresas españolas que se dedican a combatir incendios han sido acusadas por cohecho y tráfico de influencias en Europa.
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Una de ellas, Faasa, manifestó a través de un comunicado de prensa rechazó sus vínculos con los delitos investigados y manifestó su disposición a colaborar con las investigaciones.
Junto a las empresas Inaer Helicópteros y Martínez Ridao, están bajo la sospecha de colusión para obtener contratos en España, Portugal e Italia.
Faasa Chile expresó que cumplen «con todas las exigencias aeronáuticas dispuestas por la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC) y con todos los requisitos legales exigidos por las autoridades chilenas para desarrollar libremente su actividad» y que «ha cumplido rigurosa y transparentemente con los requerimientos y filtros exigidos por el Estado a través de ChileCompra».
Por esto, la empresa dice las acusaciones «resultan injustificadas las insinuaciones de que la participación de la empresa en distintas emergencias puedan obedecer a motivos diferentes a consideraciones técnicas».
«Hoy Faasa Chile mantiene sólo un contrato vigente con Conaf, que pasó por todo el proceso regulatorio vigente», señaló.
Además, la empresa manifestó que no descarta en interponer acciones legales si se comprueban imputaciones públicas, asegurando que tienen completa disposición para la entrega de información.
El comunicando concluye sentenciando que: «En relación a la investigación abierta en España, es preciso aclarar que se trata de pesquisas que se desarrollan a toda la industria, sin sentencias, y que tanto Faasa –matriz de Faasa Chile- como otras compañías, siguen contratadas por las Administraciones de España. Además, en ese país no existe abierta ninguna investigación Contra Faasa por cohecho internacional, tráfico de influencias, soborno o negociaciones prohibidas con funcionarios públicos. Las diligencias en curso en ese país tienen que ver con materias propias de ese mercado y la competencia»
