El gigante tecnológico nipón Toshiba se disparó este martes en la Bolsa de Tokio tras la publicación del precio por el que la compañía pretende vender su negocio de microchips, una de sus ramas más rentables, que duplica al inicialmente esperado.
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Toshiba Corporation llegó a avanzar más del 12 por ciento tras la apertura, y en la pausa de mitad de sesión un avance del 11,70 por ciento, hasta situarse en los 205,2 yenes (1,7 euros /1,8 dólares).
Las acciones de la compañía nipona habían perdido más de la mitad de su valor desde que anunciase a finales del pasado diciembre un deterioro multimillonario de activos de su rama nuclear que derivará en cuantiosas pérdidas para la entidad, según sus previsiones.
La recuperación de sus títulos tuvo lugar el mismo día en que el diario nipón Nikkei adelantó el precio de venta que Toshiba reclama por su negocio de memorias flash, que ascendería a unos 2 billones de yenes (17.600 millones de dólares).
Esta cantidad duplica a la que publicaron en la víspera otros medios, en el marco de una operación con la que Toshiba aspira a recuperar la liquidez sacrificando parte de su de unidad de microchips para ordenadores y teléfonos móviles, segundo fabricante mundial del sector.
El motivo del incremento del precio solicitado es que Toshiba está dispuesto a vender ahora cerca del 50 por ciento de las participaciones en la filial, mientras que anteriormente sólo pretendía vender el 20 por ciento, según fuentes empresariales citadas por el diario Nikkei.
La corporación nipona aspira a cerrar la venta después de que concluya el año fiscal nipón el próximo 31 de marzo, y entre los posibles compradores se encuentran gigantes tecnológicos como los estadounidenses Microsoft y Apple, el surcoreano SK Hynx o la taiwanesa Hon Hai, conocida como Foxconn.
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Toshiba vive una época convulsa desde que a finales de año se conociera la devaluación multimillonaria de su rama de energía nuclear en Estados Unidos, que ha desembocado en la reducción de estas operaciones y en la dimisión de su presidente, Shigenori Shiga.
La empresa prevé registrar unas pérdidas netas de 390.000 millones de yenes (3.232 millones de euros) para todo el ejercicio fiscal 2016.