La Casa Blanca causó hoy polémica al vetar la asistencia de CNN, The New York Times y Politico a una sesión informativa informal (conocida como «gaggle») del portavoz presidencial, Sean Spicer.
PUBLICIDAD
Los reporteros de los tres citados medios no pudieron acceder a la oficina de Spicer en el Ala Oeste de la Casa Blanca, si bien se se permitió la entrada a periodistas de medios conservadores afines como el diario Washington Times y la web Breitbart.
JUST IN: White House blocks news organizations from press briefing https://t.co/QBjbBMvIFh https://t.co/NfsWApEri8
— CNN (@CNN) February 24, 2017
También asistieron medios como ABC, CBS, The Wall Street Journal, Bloomberg y Fox News.
Ante la medida, los informadores de la revista Time y la agencia Associated Press (AP) se negaron a acudir al «gaggle» como protesta.
Reporters from Time magazine and The Associated Press chose not to attend in protest of the White House’s actions https://t.co/o1GQyARmwC
— The New York Times (@nytimes) February 24, 2017
«Nada de esto ha sucedido nunca en la Casa Blanca en nuestra larga historia de cubrir a múltiples Gobiernos de diferentes partidos», afirmó el director ejecutivo de The New York Times, Dean Baquet, en un comunicado.
«Protestamos contundentemente contra la exclusión de The New York Times y otros medios. El libre acceso de la prensa a un Gobierno transparente es obviamente de interés crucial», agregó Baquet.
PUBLICIDAD
El presidente de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca, Jeff Mason, afirmó en un comunicado que emitirá una protesta sobre cómo «se ha manejado el ‘gaggle’ de hoy» y abordará el asunto con los responsables de prensa de la residencia presidencial
La medida tuvo lugar después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, volviera a atacar hoy a grandes medios de comunicación, a los que llamó «deshonestos», el «enemigo del pueblo» y divulgadores de «noticias falsas».
Trump administration keeps major news organizations out of closed press briefing https://t.co/I1kPWGLWvf pic.twitter.com/hQhS5OiLLu
— BuzzFeed (@BuzzFeed) February 24, 2017
En la segunda jornada de la Conferencia anual de Acción Política Conservadora (CPAC), Trump arremetió contra la prensa por pensar que nunca ganaría las elecciones presidenciales de noviembre pasado y por mantener siempre como favorita de las encuestas a la candidata demócrata Hillary Clinton.
«Estamos combatiendo las noticias falsas. Son falsas, embustes, falsas. Hace unos días llamé a las noticias falsas el enemigo del pueblo y lo son», aseguró el multimillonario neoyorquino.
«Tenemos que luchar contra ellos. Los medios son muy inteligentes, muy astutos y deshonestos (…). Se enfadan cuando exponemos sus noticias falsas», indicó el presidente ante la CPAC, el foro más importante del conservadurismo en EEUU.
Trump ha reanudado sus ataques a la prensa, que expone a diario sus imprecisiones y datos erróneos de sus discursos, por publicar filtraciones internas de su equipo citando a fuentes anónimas dentro del Gobierno.
La revista Associated Press y la revista Time boicotearon el briefing y sus periodistas no asistieron a la conferencia debido a la gestiones de la Casa Blanca, según consignó The New York Times. Debido a este hecho la Asociación de Corresponsales ha convocado a una protesta.
La guerra de Trump y los medios
Esta medida es una censura directa a los medios que el magnate considera como «Fake News», guerra que ha sostenido con la prensa ya que, según él, publicarían falsas noticias.
Las rencillas entre Trump y los medios de comunicación «censurados» comenzaron a penas el mandatario llegara a la presidencia y se fueron agrandando producto del destape de varias polémicas que se suscitarían al interior de la Casa Blanca.
https://twitter.com/realDonaldTrump/status/832708293516632065?ref_src=twsrc%5Etfw
Justamente fue el The New York Times el medio que publicó el supuesto vinculo entre encargados de la campaña electoral de Trump y agentes de la inteligencia rusa, relación en la que se habrían filtrado información relevante sobre las líneas de su mandato. Las que llevaron a que posteriormente el asesor de seguridad de la Casa Blanca, Michael Flynn, dimitiera de su cargo a un mes de ejercerlo.
Junto al episodio donde Trump hace callar al periodista de CNN, Jimmy Acosta, en su primera conferencia de prensa como mandatario, este veto será una de las ocasiones más polémicas a las que el mandatario se enfrentará.