El Gobierno dio hoy el vamos a un conjunto de medidas destinadas a ayudar a los agricultores, pequeños y medianos empresarios y dueños de aserraderos, que se vieron impactados por los incendios que afectaron a la zona centro-sur del país durante el período estival.
Si la primera etapa fue el control de la emergencia, y luego vino el catastro de los afectados, ahora las autoridades anunciaron el plan de acción diseñado para impulsar el proceso de recuperación de las capacidades productivas en los distintos sectores.
Los ministros de Hacienda, Rodrigo Valdés; de Economía, Luis Felipe Céspedes; de Agricultura, Carlos Furche; de Medioambiente, Pablo Badenier junto al coordinador para la reconstrucción, Sergio Galilea; el vicepresidente ejecutivo de Corfo, Eduardo Bitran y al director de Conaf, Aaron Caviedes detallaron los pasos a seguir.
En el ámbito agrícola, para este año se contempla un registro de propietarios con bosque nativo y plantaciones forestales afectados por los incendios; la entrega inmediata de apoyo para requerimientos urgentes de propietarios pequeños; apoyo para la rehabilitación y plantación de los suelos afectados por el fuego, entre otras.
El titular de Hacienda, Rodrigo Valdés, señaló que “desde el punto de vista financiero”, el costo de la catástrofe estimado inicialmente en US$ 333 millones se eleva a US$347 millones ($246 mil millones de pesos), lo que incluye $ 8 mil millones de agricultura que no estaban presupuestados.
Por su parte, el ministro Céspedes destacó que los “instrumentos que estamos entregando a través de Corfo buscan potenciar la actividad: tenemos un programa estratégico, de especialización en materia de madera precisamente bajo la lógica de agregar valor en este sector”.
Además, agregó Céspedes, habrá programas para recuperar la madera, lo que requiere financiamiento, apoyo tecnológico y capacidades técnicas para el tratamiento y la reforestación.
En tanto, el ministro de Agricultura indicó que lo que se está haciendo va en apoyo directo de los agricultores pequeños y medianos del sector forestal.
“Aquí se trata de la gestión de recursos para establecer capacidades productivas a nivel de plantación que estará a cargo de Conaf o de Corfo y también de inyección de recursos para restablecer la capacidad productiva a nivel de aserraderos”, puntualizó Furche.
