Este 2017 se cumplen tres años del segundo mandato de la Presidenta Michelle Bachelet, y desde la Fundación Ciudadano Inteligente midieron el grado de avance de las promesas de campaña de la mandataria, a través del estudio “Del dicho al hecho”, el que tiene como objetivo informar de forma clara y comprensible a la ciudadanía el contraste entre los compromisos adquiridos y lo realmente cumplido.
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En la nueva versión del estudio, el gobierno de la Presidenta Bachelet logra un 48% en el promedio de avance del número de sus promesas, porcentaje superior al obtenido por el ex Presidente Sebastián Piñera quien a la misma fecha tenía un 37% de avance en el cumplimiento de sus compromisos.
El 11% superior obtenido en el tercer año de Bachelet, adquiere mayor relevancia dado que la actual mandataria realizo 172 promesas, mientras que Piñera realizó 156 compromisos. Pese al porcentaje de la Presidenta, desde Ciudadano Inteligente expresan que el posicionarse bajo la mitad de lo prometido es bajo.
“Si alguien cumple la mitad de lo que prometió es insuficiente, en términos relativos está en mejor pie que el gobierno anterior, pero estos números no nos dejan completamente satisfechos desde la perspectiva ciudadana, porque en las elecciones se toman compromisos que se deben cumplir entre la ciudadanía y los representantes”, señala Octavio Del Favero, coordinador legislativo de Ciudadano Inteligente.
Áreas con mejor y peor avance
Las tres áreas que cuentan con un alto porcentaje de avance son Energía (95%), Educación (73%) y Equidad y género (68%), mientras que Agricultura (20%), Infancia y Jóvenes (20%) y Transporte y Telecomunicaciones (8%) resultan con los resultados más bajos.
El área modelo del gobierno de Bachelet es Energía, cartera en la que además de lograr el más alto porcentaje de avance, obtiene 3,2 puntos de 4 de coherencia, lo que quiere decir que al contrastar los distintos proyectos de ley con la promesa original, tienen un grado de alta fidelidad, lo que se puede evidenciar con el fomento a las energías renovables no convencionales, el uso de energía solar en subsidios habitacionales y el fortalecimiento del rol de Enap.
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Otras de las áreas con un alto porcentaje es Educación, la que también cuenta con un alto número de coherencia 3,3 de 4, lo que se logra en gran parte gracias al proyecto de ley de Educación Superior, instancia que aún está en el primer trámite legislativo, y contempla la creación de la Subsecretaría de educación Superior, Superintendencia de Educación Superior, Agencia de la Calidad de la Educación Superior y un nuevo sistema de acreditación de instituciones de Educación Superior.
La cara opuesta está dada por Transporte y Telecomunicaciones, la que sólo logra un 8% de avance legislativo y un 1,6 puntos de 4 en la escala de coherencia, área que si bien cuenta con cinco promesas, sólo una de ellas está asociada a un proyecto de ley.
“El proyecto de ley sobre modificación del régimen de concesiones en Telecomunicaciones es el único, el resto de las promesas no están relacionadas con Transporte, por lo que se puede evidenciar que esto no fue una prioridad programática a nivel legislativo para el actual gobierno”, asegura, Laura Encalada, coordinador metodológica de Ciudadano Inteligente.
